Cómo localizar el cérvix o cuello uterino para usar la copa menstrual

Si te has estado informando sobre cómo utilizar una copa menstrual es posible que también te hayas preguntado cómo se debe colocar y cómo saber qué tipo de copa debes utilizar. Puede parecer un poco abrumador al principio. Sin embargo, no es nada difícil y te ayudará mucho a conocerte. Una de las principales cosas que debes hacer antes de nada es localizar tu cérvix, también conocido como cuello del útero. ¿Por qué? 

Escoger una copa menstrual que no es de tu talla te hará sentir incómoda. Por eso es importante elegir el tipo de copa que necesitas en función de si has dado a luz, el flujo que tengas o la longitud de tu canal vaginal. Para ello lo primero que necesitaremos es saber cómo localizar el cérvix o cuello uterino para empezar a usar la copa menstrual con unas características concretas que necesitas. 

Paso a paso para localizar tu cuello uterino o cérvix

La copa menstrual debe adaptarse a las paredes de la vagina, por lo tanto hay que saber localizar el cuello uterino. Se trata de la conexión que existe entre la vagina y el útero, que suele tener un tacto diferente y su diámetro puede extenderse de los 3 centímetros hasta los 10 si vas a dar a luz. Es donde se desliza la menstruación y donde debes colocar la copa menstrual. 

Una vez sepamos qué es el cuello uterino, "debemos tener en cuenta si es más alto o más bajo además de una serie de criterios (tipo de flujo, si has tenido hijos...) para elegir la talla de la copa menstrual", según indica en una entrevista Pilar Ruiz, responsable de comunicación de Intimina. 

+ Escoge un momento tranquilo

Para localizarlo debes estar relajada y tomarte tu tiempo, al igual que la primera vez que decidiste ponerte un tampón. Lávate bien las manos y los dedos con jabón, pues utilizarás estos para localizarlo. 

+ Siéntate

Muchas mujeres sienten que es más fácil encontrar su cérvix si se encuentran sentadas y quizás un poco inclinadas pero no recostadas o de pie. Por ejemplo, en el borde de la cama o en el borde del váter, con las rodillas abiertas.

+ Introduce tu dedo

Es el momento de intentar localizar tu cérvix. Antes de empezar debes tener en cuenta varias cosas: quizás no te resulte fácil y te lleve un rato. Por eso debes tener paciencia y estar relajada, no ponerte nerviosa.

+ Sé consciente de lo que estás buscando

Es posible que dependiendo del momento del ciclo menstrual en el que estés, tu cuello del útero esté más alto o más bajo. Cuando introduzcas el dedo en la vagina muévelo suavemente. Es mejor que introduzcas el dedo corazón pues es el más largo. Cuando lo localices sentirás que no puedes seguir avanzando y, además, un cambio de textura. Puede que sea firme o suave.

+ ¿Cómo saber si lo he encontrado?

Tu vagina tiene diferentes rugosidades y tu cuello del útero será diferente, más firme. Pero, como te hemos dicho antes, puede que a algunas personas les cueste un poco más encontrarlo. Date varias oportunidades.

+ Determina si tu cuello es bajo, medio o alto

Para saber cómo tienes el cérvix vas a utilizar la medida de tus dedos. Si cuando lo tienes localizado tan solo has metido la primera falange de tus dedos, lo tienes bajo. Si has metido dos falanges, es medio y si, por el contrario tienes que meter el dedo completo en la vagina hasta tocarlo, tu cuello es alto. 

Si no has sido capaz de localizarlo a la primera, date algunas oportunidades más. De hecho, es recomendable que intentes localizarlo durante varios meses y en diferentes períodos. Para conocerse hace falta tiempo pero nos ayudará a comprender mucho mejor nuestro cuerpo y cómo nos sentimos. Si después de varias oportunidades no has logrado localizarlo, siempre puedes acudir a tu ginecólogo y que te mida el cuello del útero, pero si el objetivo es colocarte una copa menstrual, sería mejor que aprendieras tú para saber colocártela de forma correcta y que no te moleste. Todo, al final, es cuestión de tiempo.

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