Porfirofobia: características del miedo al color púrpura

¿Te gusta el color púrpura? Puede que seas una persona enamorada del púrpura, del violeta o del morado, que te vistas habitualmente con ese color, que tus complementos lleven siempre un toque violeta o que el morado sea el protagonista de la decoración de tu casa. O puede que no puedas ver este color ni en pintura y no es que no te guste, es que te provoca miedo y angustia. Es entonces cuando puedes plantearte que tal vez sufres porfirofobia o miedo al color púrpura del que te hablamos en nuestro diccionario de fobias.

Qué es la porfirofobia

La porfirofobia es el miedo al color púrpura, al violeta o al morado. Uno de los colores preferidos por mucha gente se convierte en este caso en estímulo de una fobia. Es cierto que no es un trastorno muy frecuente, pero ya hemos visto en nuestro diccionario de fobias otros casos de cromatofobia en el caso de las personas que temen al amarillo o al verde.

Que la porfirofobia no sea muy frecuente no quiere decir que no tengamos que ocuparnos de ella, ya que se trata de una fobia muy limitante. Esa reacción de evitación que se produce en cualquier trastorno fóbico, es complicado llevarla a cabo en el caso del miedo al púrpura. ¿Cómo evitas en el metro a esa persona que lleva un abrigo morado?, ¿y si tu oficina tiene las paredes pintadas de violeta?

Síntomas de la porfirofobia

Cuando no se puede evitar el estímulo de la fobia, aparecen todos los síntomas de la ansiedad, los que ya conocemos de sobra y que empiezan con una sensación de que algo va a ir mal, muy mal. Luego pasa al nerviosismo por empezar a sentir una serie de reacciones físicas que van desde el mareo hasta el ataque de pánico pasando por las palpitaciones.

Al final es inevitable sentirse diferente a los demás. ¿Por qué no puedo ver el color púrpura? ¿Por qué lo considero como un color peligro? ¿Qué me puede pasar si veo el color púrpura? La falta de respuestas no evita que la persona sufra problemas de autoestima y termine con un aislamiento social autoimpuesto para no tener que verse en la situación que le provoca el miedo.

Causas de la porfirofobia

En la mayoría de las ocasiones la porfirofobia, al igual que la xantofobia y otros trastornos pertenecientes a la cromatofobia, terminan por causar agorafobia. El mundo exterior está lleno de colores, entre ellos el morado que tan peligroso considera la persona con porfirofobia. Será mejor quedarse en casa y no exponerse al peligro.

¿Y qué ha ocurrido para que una persona considere que un color pueda hacerle algún daño? En la mayoría de las ocasiones se trata de un trastorno de ansiedad previo que ha generado las fobias más diversas. Y otras muchas veces lo que ha desarrollado la fobia es una experiencia traumática en la que el color púrpura ha quedado relacionado con un episodio de una gran carga emocional.

Tratamiento de la porfirofobia

Todas las fobias se pueden superar, pero no intentes vencer tu fobia por tus propios medios. La ayuda psicológica es fundamental tanto para superar la porfirofobia como para evitar la aparición de nuevos trastornos en el futuro, así que ponte en manos de profesionales.

La terapia cognitivo conductual es la más eficaz a la hora de tratar cualquier fobia, ya que trabaja desde ese pensamiento inicial distorsionado que considera el color todo un peligro. A partir de ahí, se puede modificar la conducta de evitación y el propio miedo.

En las fobias a los colores resulta también muy útil la terapia de exposición gradual, siempre guiada por un profesional. Primero te imaginas el color púrpura y visualizas situaciones en las que no te ocurre nada malo, solo es un color. Y luego, poco a poco, vas poniéndote en situaciones reales en las que te encuentras ese color.

¿Tienes curiosidad por saber las características de algún otro miedo? No olvides visitar nuestra categoría de fobias para dar respuesta a todas tus preguntas.

Puedes leer más artículos similares a Porfirofobia: características del miedo al color púrpura, en la categoría de Fobias en Diario Femenino.