Peligros de quedarse estancada en el pasado: reconecta con el presente

¿Alguna vez te has preguntado dónde está tu mente en el día a día? ¿En lo que ya hiciste o viviste? ¿En los recuerdos? ¿En el futuro, las expectativas y las ilusiones? ¿O en el momento actual?

Lo cierto es que las personas que más disfrutan de la vida suelen ser aquellas que están más centradas en lo que les ocurre que en lo que ya les ocurrió o en lo que les ocurrirá. Es decir, personas centradas en el momento actual.

¿Sientes que estás estancada en el pasado? ¿Por qué puede ocurrir? ¿Qué peligros conlleva esto y cómo podemos reconectar de nuevo con el presente? ¡Hablamos sobre ello!

Los 4 peligros de quedarse estancada en el pasado

¿Qué peligros conlleva quedarse estancada en el pasado? Describimos 4 de ellos.

1 Te conviertes en espectadora de tu vida

Uno de los peligros de quedarse estancada en el pasado es que, al hacerlo, automáticamente te conviertes en espectadora de tu propia vida. Dejas de vivir tu vida como protagonista, centrada en el presente, para vivirla como espectadora. 

Es decir, en lugar de experimentar el día a día y lo que te sucede, en tus propias carnes, empiezas a tener la sensación de que todo lo ves desde fuera, como si le pasara a otro/a. Y eso es porque, en realidad, tu mente no está centrada en lo que vives, sino en lo que has vivido. Tu atención está en otra cosa, y de ahí esa sensación de distanciamiento con la propia realidad.

2 No disfrutas igual

Por otro lado, también es cierto que, al estar nuestra mente "en otras cosas" (en lo que YA sucedió), nuestra capacidad de disfrutar del presente disminuye, precisamente porque nuestra mente no está en él. 

Aunque tengamos recuerdos del pasado y expectativas de futuro (y es bueno tenerlos), lo cierto es que las personas más felices son aquellas que viven realmente en el presente, y que son capaces de disfrutar de él. Porque, si lo piensas bien, el presente es lo único que existe ahora mismo, ¿No crees?

3 Puedes sufrir síntomas depresivos

En las personas depresivas es muy típico que su mente se sitúe mucho más en el pasado (o incluso en el futuro, junto a síntomas de ansiedad) que en el presente. Son personas que le dan muchas vueltas a lo que ya sucedió, a lo que hicieron o les hicieron, etc. 

Y que, además, se sienten culpables por ello, por lo que hicieron o no hicieron... Por ello, vivir anclada en el pasado puede aumentar el riesgo de sufrir síntomas depresivos, ya que podemos pasar perfectamente de la nostalgia a la melancolía y la tristeza. 

4 Experimentas la sensación de que no avanzas

Otro de los peligros de quedarse estancada en el pasado es que podemos experimentar la sensación de no avanzar. Sentimos que la vida pasa frente nuestro, pero nuestra mente no está en ella, sino en el pasado y en los recuerdos. 

Podemos sentir también que solo los demás avanzan, y no nosotras. Y es que quizás, en esa sensación subjetiva, también haya algo de realidad. Porque, si lo piensas bien, ¿se puede realmente avanzar cuando no caminamos en nuestro presente? ¿Cuando todo lo que hacemos está enfocado en darle vueltas a lo que ya sucedió? ¡Resulta complicado!

Cómo reconectar con el presente: ideas clave

¿Sientes que vives anclada en el pasado? ¿Deseas salir de él y empezar a avanzar? ¿Cómo reconectar con el presente? Te damos algunas ideas clave que pueden ayudarte:

+ Céntrate en lo que estás haciendo

Una primera tip que puede ayudarte a centrarte en el momento presente es algo tan fácil (y a la vez tan difícil) como lo es centrarte en lo que estás haciendo actualmente. Imagínate que estás cocinando; pues céntrate en ello. 

Lo mismo si corres, caminas, estás con tu pareja o tus amigos, estás mirando una serie… Si tu mente se va a otro lado (por ejemplo, a algún recuerdo, a lo que "tendrías que" estar haciendo, etc.), recolócala en la acción que estás llevando a cabo. Se trata de una pequeña práctica propia del mindfulness que, si vas haciendo de forma recurrente, cada vez te costará menos de llevar a cabo.

+ Identifica hacia dónde va tu atención

El paso anterior nos permite centrarnos en las tareas cotidianas, centrando nuestra atención al momento actual, aunque está enfocado en un nivel más superficial de nuestra mente. Si deseas avanzar un paso más hacia la reconexión con el presente, te animamos a identificar hacia dónde va tu atención cuando dices que sientes que vives en el pasado. 

Es decir, sientes que estás estancada en el pasado, pero, ¿dónde exactamente? ¿En qué lugar del pasado? ¿Con qué personas, relaciones o momentos? ¿Qué es lo que te "ata" realmente al pasado? Con este pequeño ejercicio de introspección podrás pasar a la siguiente idea que te proponemos.

+ Analiza por qué tu mente sigue ahí

Una vez identificado el lugar exacto al que va tu mente (recuerdos con una expareja, recuerdos en otra ciudad, con otro trabajo…), te animamos a analizar qué causa o causas explican por qué en realidad estás más ahí que en el presente. 

Pregúntate: ¿sientes aún por tu expareja? ¿Estás idealizando una vida pasada? ¿Echas de menos a alguien? ¿Qué no te satisface de tu presente? Ten en cuenta que, cuando nuestra mente decide viajar y quedarse en el pasado, es porque el presente no le satisface. Quizás ahí tienes otra clave para empezar a trabajar en esto: identifica qué no te gusta de tu presente e intenta cambiarlo.

+ Haz el proceso de duelo 

El duelo es la reacción natural a la pérdida, que nos permite adaptarnos a la nueva realidad; muchas personas que no transitan adecuadamente su duelo al sufrir una pérdida (una ruptura, la muerte de un ser querido, el cambio a una nueva ciudad…), pueden estancarse en el pasado. 

Por ello es tan importante pedir ayuda profesional si nos sentimos estancadas, ya que a veces el acompañamiento emocional facilita este estancamiento en alguna de las fases del duelo. 

+ Realiza un ritual para soltar

Por otro lado, los rituales también resultan muy beneficiosos cuando necesitamos cerrar etapas y despedirnos. Es una manera de honrar lo vivido y de soltar. Quizás tú necesitas cerrar alguna etapa, y por ello, un ritual puede irte bien para soltar y reconectar con el presente y el futuro. 

Un ritual puede ser cualquier acción que tú elijas; escribir una carta, quemar una foto, guardar una cajita con recuerdos, poner unas velas en algún rincón, tirar algún objeto relacionado con esa persona o con esa época de nuestra vida, etc.

+ Busca ilusiones en el presente

Finalmente, otra idea para no estancarnos en el pasado es buscar ilusiones (viejas o nuevas) en el presente. Así que te animamos a investigar, en tu día a día, qué es aquello que aún te hace vibrar o sentir. Algo que tenga que ver con tu vida actual, y no con lo que ya viviste.

Puede ser cualquier cosa: tomar algo con una amiga, llamar por teléfono a un ser querido, apuntarse a alguna afición, leer un buen libro, planificar un viaje… Estas pequeñas acciones te ayudarán a reconectar con la ilusión; al fin y al cabo, la ilusión es la esperanza de futuro, y lo que nos permite vivir de manera más consciente nuestra realidad.

Y tú, ¿vives más en el pasado, en el presente o en el futuro? Si la respuesta es en el pasado, te animamos a leer los peligros que ello supone y a poner en práctica algunas de las ideas clave propuestas.

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