El color de los ojos, una cuestión de confianza

Encontramos infinidad de sentencias populares alrededor de las relaciones sociales. Una de ellas es que "la primera impresión es la que cuenta", algo que nos lleva irremediablemente a situar al aspecto físico como el factor determinante cuando conocemos a una persona. Y es que tanto la forma del rostro como el color de los ojos nos influyen en la impresión que nos dan los demás. ¿Te has preguntado alguna vez por qué hay personas que sin conocerlas demasiado nos inspiran más confianza que otras?

El color de los ojos que más confianza nos inspira

La Universidad Charles de Praga nos has presentado un estudio que demuestra la importancia del color de los ojos en la percepción que tenemos de otras personas, especialmente, si son de fiar o no. Los resultados son los que nos temíamos, las personas, sobre todo hombres, con los ojos azules inspiran menos confianza que aquellas que tienen los ojos marrones.

El estudio no aclara el porqué de esa desconfianza hacia los ojos azules, aunque suponemos que es porque no deja de ser un rasgo menos común y más particular que los ojos marrones. Hay que anotar, que este estudio sobre la confianza transmitida a través del color de los ojos es válido únicamente en el caso de los hombres, ya que parece ser que las mujeres, en líneas generales, inspiran más confianza.

Así pues, parece que ahora tenemos una herramienta más en la que basarnos en nuestra búsqueda del hombre ideal, ya que la confianza es uno de los pilares fundamentales para que una relación de pareja funcione. En base a esto deberíamos restringir la búsqueda a aquellos hombres de ojos marrones, por una cuestión de pura confianza y, si el color marrón no te parece demasiado atractivo, siempre puedes convencerte de que sus ojos son de color miel, que queda más sexy.

Otros rasgos que nos dan confianza

Aunque se trata de un estudio reciente, estos resultados ya los conocíamos a través de la sabiduría popular de una canción de las siempre; esa que habla de que los ojos verdes son traidores, los azules mentirosos y los negros y castaños son firmes y verdaderos. Ahí lo tienes.

Pero no sólo el color de los ojos determina la confianza que depositamos en una persona. La forma del rostro también influye en nuestra percepción de la otra persona. Así, parece que un hombre con la cara redonda y mandíbula prominente nos inspira más confianza que uno con rasgos angulosos. El tamaño también importa, al menos el de los ojos y los labios, que cuanto más grandes más dignos de confianza.

Obviamente este tipo de estudios hablan de una tendencia inconsciente para determinar el grado de confianza que nos inspira una persona, lo que no quiere decir que nos lo tengamos que tomar al pie de la letra, porque la personalidad y la ética de una persona no se va formando conforme a los rasgos físicos, sino a factores emocionales y culturales. Así que tranquila, puedes ceder a los encantos de ese vecino irresistible de pelo oscuro y ojos azules que tanto te gusta y que el tiempo decida si se trata de un hombre de confianza o no.

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