Carpe Diem ¡o envejecerás! Cómo mantener la atención y concentración

Hay personas que viven en su propio mundo a las que les cuesta concentrarse en el momento presente que están viviendo. Su mente se dispersa hacia el pasado, que siempre fue mejor, o sueñan planeando un futuro de cuento.

También hay personas que son incapaces de prestar atención durante mucho tiempo y centrarse en la tarea que están haciendo porque su mente enseguida se pone a divagar elaborando extraordinarias teorías sobre la felicidad. Si eres de esas personas soñadoras o despistadas, si tu mundo interior es más importante que el momento real actual, cuidado, porque estás acelerando el envejecimiento.

La mente dispersa envejece antes

La Universidad de California ha presentado un estudio sobre el envejecimiento celular y ha llegado a la conclusión de que las personas que tienden a divagar o a alejarse mentalmente del momento presente tienen los telómeros más cortos, lo que acelera el envejecimiento. Y ¿qué son los telómeros? Pues ni más ni menos que fragmentos de ADN que recubren y protegen el final de los cromosomas que contienen el material genético. Así que lo que hacen los telómeros es proteger ese material genético.

Parece ser que los telómeros se van acortando con la edad y por eso envejecemos. Pero también pueden ir acortándose por otros factores externos y la divagación y dispersión mental es uno de ellos. La conclusión es que si queremos retrasar el envejecimiento celular, es importante prestar más atención al momento presente, concentrarnos más en lo que estamos haciendo y dejar de escaparnos mentalmente a otros mundos más agradables.

Cómo concentrarte en el presente

Lo difícil es evitar que nuestra mente se disperse y mejorar nuestra capacidad de concentración y mantenernos en el presente. Pero hay técnicas que nos pueden ayudar. No se trata de dejar de ser unas soñadoras, sino de empezar a movernos para conseguir esos sueños y convertirlos en una realidad que podamos vivir. Lo más importante es tomar conciencia de lo que nos estamos perdiendo si dejamos que nuestra mente se escape continuamente a mundos pasados o futuros.

Para ayudarnos a centrar la atención en lo que estamos haciendo o viviendo hay algunas técnicas de meditación, como la llamada meditación "mindfullness" o técnica de atención plena que evita la dispersión mental y favorece la concentración. Se trata de pararnos a reflexionar y centrar nuestra atención en qué estamos haciendo, cómo lo estamos haciendo y para qué lo estamos haciendo, con lo que conseguiremos una imagen mental global de la actividad en sí que impide que nos "vayamos" a otro lado.

En realidad se trata de focalizar la actividad que se está realizando en el momento presento y dejar que sea eso lo que ocupe toda la mente. De esta manera y haciéndonos las preguntas de qué, cómo y para qué, la mente se centra en la experiencia concreta y no necesita otro foco de atención. Cualquiera puede intentar esta técnica de meditación en casa, pero si no te ves capaz de hacerlo sola, son muchos los talleres que te enseñan a hacerlo.

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