Cómo convertirte en voluntaria: ayuda a los que lo necesitan

Vivimos tiempos complicados. A todas horas nos bombardean imágenes y escenas de personas que, muy cerca de nosotras, lo están pasando realmente mal. Seguramente te hayas planteado en más de un momento que tú misma podrías ayudar. Así es. Hay muchísimas formas de hacerlo y todas son significativas.

En España hay alrededor de cuatro millones de personas que realizan este tipo de tareas, según informa la Plataforma de Voluntariado de España. Sin embargo, las estadísticas muestran que, con un 23% de media de voluntarios, estamos por detrás de la media europea: el 30%.

Hay muchas formas de ayudar y todas son igualmente válidas e importantes. Lo fundamental es que des el primer paso. Te ayudamos a hacerlo.

Pasos para convertirte en voluntaria

El único requisito para ser voluntario es querer ayudar. Una vez decidida, piensa de forma realista de cuánto tiempo dispones. De nada vale querer estar disponible 40 horas a la semana, si en 15 días no vas a dar abasto con otros aspectos de tu vida. Cada hora de ayuda desinteresada es de agradecer. Es mejor que empieces poco a poco, la asociación u ONG a la que ayudes también se organizará mejor así.

Analiza cuáles son las ONGs u organizaciones cercanas a ti en las que podrías ser útil y guíate por tu instinto. Ten en cuenta que muchas acciones de voluntariado pueden desarrollarse también de forma online. Escoge aquella que más te conmueva, cuya labor consideres más relevante: mayores, niños, animales, cultura, medio ambiente, ayuda a víctimas de violencia, reclusos, etc. La  Plataforma del Voluntariado de España cuenta con un mapa en el que figuran las distintas asociaciones adscritas y la organización HacesFalta.org dispone también de un buscador que podrá ser muy útil en tu búsqueda.

Una vez seleccionada la ONG, dirígete a ella, mejor si es de forma presencial, y ofrece tus ayuda. Ellos te informarán del modo de unirte a ellos. Lo habitual es firmar un documento estándar de voluntariado.

Tu decisión de formar parte del voluntariado no solo ayudará a muchas personas que lo necesiten, sino que te ayudará a ti misma; te sentirás realizada y valorada, y aprenderás a relativizar muchos de tus problemas cotidianos.

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