Guía de estilo infalible para combinar un vestido según su color, tejido…

Seguro que en tu armario tienes más de un vestido (y más de dos) de diferente color, tejido, estampado o forma. Y es que estas prendas son muy prácticas, pues pueden servirte para prácticamente cualquier ocasión. Sin embargo, muchas veces te pondrás ese vestido que tanto te gusta y te harás la gran pregunta: ¿cómo combinarlo?, ¿cómo darle un giro a tu look si siempre combinas igual tu vestido, con los mismos complementos?

En Diario Femenino hemos creado una guía de estilo infalible para combinar un vestido según sus características, pues son la clave para saber lucirlo con estilo y con los accesorios y calzado adecuados. Vamos a descubrir juntas los mejores trucos para acertar siempre y sacarle el máximo partido a tus vestidos, ¡sigue leyendo!

¿Cómo combinar un vestido según su color? Looks y combinaciones ideales

Encontrar la combinación perfecta para cada vestido según su color puede parecer una tarea algo complicada, sobre todo si quieres añadir otros colores o huir del clásico negro o blanco para combinar. A continuación tienes una guía sobre cómo combinar los diferentes colores con los accesorios y el calzado adecuado, ¡toma nota!

• Vestido blanco
• Vestido negro
• Vestido gris
• Vestido marrón o beige
• Vestido amarillo
• Vestido naranja
• Vestido rosa
• Vestido rojo
• Vestido morado
• Vestido azul
• Vestido verde
• Vestido dorado
• Vestido plateado

+ Vestido blanco

El blanco es un color elegante, nunca pasa de moda y además denota optimismo y pureza. Ofrece miles de posibilidades a la hora de combinarlo, pues suele quedar bien con prácticamente cualquier otra tonalidad en los accesorios. Con negro es la combinación siempre ganadora, pero también se puede combinar con tonos metalizados o colores vivos para dar un toque vibrante a tu look.

Eso sí, recuerda que lo que más prevalece es la ocasión en la que vayas a lucir tu vestido. Por ejemplo, para un bautizo o una comunión lo mejor es añadir color a través de tu bolso y de tus zapatos, pero para ir a la oficina o para un evento más informal, puedes combinarlo con otros colores neutros, como el beige, ¡estarás divina!

+ Vestido negro

Si hay una prenda que no debería faltar en tu fondo de armario, esa es el vestido negro. Se trata de una pieza que nunca falla, aporta distinción a tu estilismo y además puedes llevarlo en cualquier ocasión. ¿Cómo combinarlo? Es muy sencillo, puedes apostar por tonos metálicos o por colores vivos, como el rojo o el verde, para un look llamativo.

Pero si quieres darle el pleno protagonismo a tu vestido negro, siempre puedes elegir colores más pastel, como el rosa cuarzo o el azul celeste, o bien el clásico color blanco o beige para un look más relajado. También puedes añadir prendas o accesorios de estampados, como el tweed o los cuadros.

+ Vestido gris

Igual que ocurre con el vestido negro, el gris también está cargado de posibilidades a la hora de lucirlo en cualquier ocasión y con prácticamente cualquier color o estampado. Se trata de un color sobrio con el que puedes transmitir tanto elegancia como seguridad, profesionalidad e informalidad, según cómo lo combines.

Por ejemplo, los accesorios plateados o en negro son ideales para mantener la paleta monocromática. Pero, si quieres darle más vida a tu look, puedes añadir un color o dos en tus zapatos y en tu bolso, como el rojo, el verde, el amarillo o el azul. ¡Tú decides!

+ Vestido marrón o beige

Continuamos con los colores neutros y llegamos al vestido marrón o beige. Esta tonalidad tan natural y tan elegante aporta un toque de calidez a prácticamente cualquier look y, además, es tan versátil que puede ser combinado con otras muchas tonalidades según la ocasión en la que vayas a lucirlo.

Puedes combinar tu vestido marrón con otras tonalidades neutras, como el blanco, para un estilismo relajado. También permite otras tonalidades metalizadas, sobre todo el dorado, para un look muy chic y cargado de glamour. ¿Y qué otros colores quedan bien con este vestido? Desde el rosa hasta el verde pasando por el azul, son muchos los colores que quedan de maravilla.

+ Vestido amarillo

Los vestidos de color amarillo suelen ser bastante llamativos y vibrantes, por lo que necesitas combinarlos con otras prendas y accesorios de colores menos vivos para conseguir un perfecto equilibrio en tu outfit. Por ejemplo, colores como marrón, beige, dorados o blancos son idóneos para un look de 10.

Si quieres añadir un toque de color a tu vestido amarillo, nada mejor que apostar por tonalidades azules o violetas, colores complementarios que resultan una opción totalmente recomendable. Conseguirás un look fresco sin necesidad de robarle ese protagonismo (que ya tiene) a tu vestido.

+ Vestido naranja

Desde hace un tiempo los vestidos naranjas se han colocado entre los más solicitados, y no es para menos. Y es que es una tonalidad ideal para quienes quieren destacar con un look cálido y enérgico, pues es un vestido que ya dice mucho por sí mismo. Por esta misma razón, lo ideal es no sobrecargar demasiado el look y escoger los accesorios y el calzado perfectos para mantener el equilibrio.

Los tonos dorados o marrones funcionan a las mil maravillas con este tipo de vestidos, sobre todo si se trata de un naranja que ya es demasiado vivo. Pero, si se trata de una tonalidad más bien melocotón o clarito, siempre puedes arriesgar y elegir accesorios de otros colores, sobre todo en tonos morados o azules, ya que combinan muy bien.

+ Vestido rosa

Los vestidos rosas aportan un aire de romanticismo, dulzura y feminidad a cualquier outfit que se precie. Son ideales, además, para cualquier ocasión: desde una boda hasta un evento más informal, como una tarde con amigas, según el tejido o el corte de tu vestido.

Para combinarlo, puedes añadir accesorios de color dorado o plateado, o bien tonos nude o neutros para darle más protagonismo. Si quieres añadir un punto más juvenil a tu look, combina tu vestido rosa clarito con zapatos en fucsia, o bien en colores vibrantes como el verde, ¡quedan fenomenal! ¿Te atreves a ir un poquito más allá? Prueba a combinar tu vestido con rojo o granate, ¡solo para las más arriesgadas!

+ Vestido rojo

El color rojo siempre denota pasión y poder, pues es una tonalidad atrevida que roba todas las miradas. Tanto si se trata de un vestido rojo vibrante como si es de un color más apagado, como el burdeos, el rojo es y siempre será una elección segura sea cual sea la ocasión.

Bien puedes combinarlo de manera muy sencilla con accesorios en colores neutros, como el negro, o de tonalidades metaliadas con plateado y dorado, o bien puedes añadir otro color a tu atuendo. En este sentido, tendrás que tener muy en cuenta la tonalidad de tu vestido rojo, pues si es demasiado vibrante, lo ideal es escoger un color que sea más apagado. Por ejemplo, el burdeos queda muy bien con rosa palo, mientras que el rojo fuego sienta fenomenal con un verde más sobrio.

+ Vestido morado

El morado está cargado de connotaciones femeninas y místicas, por lo que es una tonalidad de lo más distinguida. Ya sea un vestido morado de tonalidad berenjena, o un atuendo más lila o violeta, el vestido morado estará entre tus favoritos si sabes cómo combinarlo con mucho estilo.

Si quieres que tu vestido sea el protagonista de tu look, nada mejor que combinarlo con zapatos, bolso y joyería de una tonalidad metalizada o neutra. Pero, si te atreves, siempre puedes combinar tu vestido con accesorios del mismo color y jugar con las diferentes tonalidades de morado, o combinarlo con naranja, amarillo o azul celeste. ¡Un look espectacular!

+ Vestido azul

Para combinar bien un vestido azul y tener un look perfecto, necesitas fijarte en la tonalidad del vestido. Y es que azules hay muchos, desde los tonos más eléctricos hasta los celestes pasando por el elegante azul noche. Sea cual sea tu elección, el vestido azul es perfecto para prácticamente cualquier evento que tengas en mente.

Una idea que puedes llevar a cabo, y que además queda muy bien, es combinar tu vestido azul celeste con accesorios y zapatos de un azul noche para un look increíble. También puedes apostar por un vestido azul noche y combinarlo con zapatos plateados para un look limpio y sofisticado. Si quieres añadir color, nada mejor que el rosa, el verde o el naranja.

+ Vestido verde

El verde siempre nos recuerda a la naturaleza, al campo, al bosque… Por eso, es una tonalidad que sienta de maravilla a cualquier persona, siendo además de lo más versátil a la hora de combinarlo. Tu vestido verde se llevará todas las miradas si sabes lucir un look en perfecto equilibrio.

Una opción muy sencilla para combinar tu vestido verde es apostar por otra tonalidad que también recuerda mucho a la naturaleza: el marrón o el beige. Pero si prefieres un estilo más refinado, combina tu vestido con zapatos y accesorios neutros o dorados, incluso con otros colores como el rosa o el azul.

+ Vestido dorado

Un vestido dorado es ya demasiado llamativo, así que lo mejor que puedes hacer a la hora de lucirlo con estilo es escoger accesorios, calzado y bolso discretos. Y es que el vestido dorado acaparará todas las miradas de por sí, por lo que necesitas prendas y piezas de ropa que no sobrecarguen tu look.

Por eso, lo ideal es escoger accesorios en tonos nude o en tonos neutros, sobre todo con marrones, beige y negros queda muy bien. También puedes apostar por otros accesorios del mismo dorado de tu vestido, o un poquito más bronce para hacer un juego de contrastes.

+ Vestido plateado

Igual que ocurre con los vestidos dorados, que son ya demasiado llamativos, el plateado también necesita de accesorios discretos para no desequilibrar el look. Los vestidos plateados son, sin lugar a dudas, los que mejor hablan de glamour, y resultan perfectos para ocasiones especiales.

Combina tu vestido plateado con accesorios que no sean demasiado llamativos, por ejemplo con blanco, negro o con nude. También puedes apostar por zapatos, bolso y joyería en plateado, de esta manera tendrás una opción clásica y llamativa que nunca pasará de moda.

Cómo combinar un vestido según su estampado: flores, lunares…

Los vestidos con diferentes estampados, como de flores, rayas o leopardo, son una manera ideal para reflejar tu personalidad en tus looks. Saber cómo combinarlos adecuadamente puede hacer que tus outfits se vean perfectos en cualquier ocasión. Eso sí, recuerda que siempre deberás escoger aquello que te haga sentir cómoda y segura.

• Vestido de flores
• Vestido de lunares
• Vestido de rayas
• Vestido de leopardo

+ Vestido de flores

Los vestidos de estampado de flores son de lo más femeninos y románticos. Además, son muy versátiles a la hora de combinarlos y pueden ser lucidos tanto de día como de noche, dependiendo del corte y del estampado. ¿Un truco para combinarlo? Si tienes dudas, nada mejor que zapatos y accesorios en tonos neutros, pero si te atreves, escoge un color predominante en las flores de tu vestido, y busca accesorios y calzado de la misma tonalidad.

Este tipo de vestidos son idóneos para un paseo por la ciudad, un día en el campo o una tarde de shopping, combinados con zapatillas deportivas y una chaqueta de mezclilla ¡estarás lista para todo! Si es un evento de noche, luce tu vestido con tacones y un clutch a juego para un look sofisticado y a la altura.

+ Vestido de lunares

Existen muchos tipos de vestidos de lunares, desde los más retro hasta los más originales y desenfadados. Todo dependerá del estampado, pues no es igual los lunares muy grandes y atrevidos, que aquellos más pequeñitos y discretos. En cualquier caso, el estampado de lunares tiene un toque muy divertido y nunca pasará de moda.

Para combinarlos con estilo, puedes apostar por accesorios y calzado en colores neutros o nude si el vestido ya tiene colores muy llamativos de por sí. Si se trata de un vestido blanco con lunares en negro (o al revés), añade algún toque de color que le aporte más dinamismo y atractivo a tu look.

+ Vestido de rayas

Los vestidos de rayas son también ideales para cualquier ocasión, desde ir a la oficina o a la playa con unas rayas marineras, hasta acudir como invitada a una boda. Siempre deberás fijarte en el estampado que tiene tu vestido, pues no es igual las rayas horizontales que las verticales (que, además, alargan tu silueta).

Lo mejor que puedes hacer a la hora de combinarlos es jugar con los colores para crear looks muy diferentes. Por ejemplo, si tu vestido es de rayas de colores rojas, rosas o azules, nada mejor que añadir un tono beige o blanco para lucirlo con estilo. Si bien tu vestido es de rayas blancas, negras o plateadas, puedes añadir un toque de algún color vibrante, como el rojo o el verde, para un outfit nocturno cargado de personalidad.

+ Vestido de leopardo

Si hay un estampado llamativo, sexy y muy atrevido, ese es el leopardo o cualquier animal print que se precie. Se trata de un estampado que puede parecer un poquito complicado de combinar, sin embargo, si lo luces bien, será tu mejor aliado a la hora de querer destacar en cualquier ocasión.

Para combinar tu vestido de leopardo y tener un acierto seguro, nada mejor que accesorios en colores marrones o negros, dependiendo de lo grande que sea el estampado, o en tonos nude o beige. También puedes añadir accesorios en color dorado o rojo, para dar un punto de glamour a tu outfit.

Ideas de looks para combinar un vestido según su tejido

Existen muchos tejidos en el mundo de la moda, y todos ellos muestran características diferentes. Por eso, es importante tenerlos muy en cuenta a la hora de saber cómo combinar tu vestido con mucho acierto, ya que no es lo mismo elegir un vestido de mezclilla que uno de cuero. ¡Vamos a verlo!

• Vestido vaquero o de mezclilla
• Vestido de punto
• Vestido de cuero
• Vestido de tweed
• Vestido de encaje
• Vestido de terciopelo
• Vestido de lentejuelas

+ Vestido vaquero o de mezclilla

El tejido vaquero o mezclilla no puede faltar en cualquier fondo de armario. Desde pantalones hasta chaquetas y faldas, el vaquero nunca falla. Por eso, si tienes un vestido vaquero en tu armario, debes saber que es ideal para un look casual, cómodo y fresco, combinable en cualquier estación.

Puedes combinar tu vestido vaquero con colores neutros, como el blanco en tus zapatillas o el marrón en tu mochila para un look casual. Pero, lo bueno que tienen este tipo de vestidos, es que también puedes añadir una gran cantidad de colores a tu outfit, ¡el vaquero pega con todo!

+ Vestido de punto

Los vestidos de punto son, sin duda, los mejores aliados para lucir looks de 10 en invierno o en otoño. Se trata de prendas cálidas, suaves y muy cómodas para lucir de manera casual o elegante, según sea el evento al que tengas que acudir. Pueden ser perfectos para llevar en el día a día, en la oficina, o en una ocasión tan especial como pueda ser la Navidad.

Para combinar tu vestido de punto, fíjate en su color. Lo ideal es hacerte con uno en algún tono neutro, como negro, beige, gris o marrón, para poder combinarlo con otras tonalidades neutras o con colores vivos. También puedes combinarlo con otro tipo de tejidos, como el vaquero, el cuero o el ante.

+ Vestido de cuero

Los vestidos de cuero son de lo más sexy, atrevidos y modernos. Son de esas prendas que, cuando las llevas, te sientes poderosa ¡y no es para menos! Existen vestidos de varios tipos, según su escote, el largo, lo ajustado que sea… Pero todos ellos sirven para looks informales o sofisticados.

Puedes combinarlo con otros tejidos, por ejemplo con una chaqueta vaquera, para un look muy rockero, o bien con prendas de ante para el calzado y el abrigo. En cuanto a los colores, tú decides: este tipo de vestidos suelen ser negros, así que son combinables con casi todo.

+ Vestido de tweed

Uno de los tejidos más clásicos y atemporales que existen es el tweed. Siendo uno de los favoritos de Coco Chanel, no hace falta que te digamos que tiene una larga trayectoria en el mundo de la moda y que, además, año tras año repite entre los que están en tendencia alrededor del mundo.

Un vestido de tweed es sofisticado, y te hará ver distinguida sin ni siquiera pretenderlo. Para combinarlo, puedes utilizar otras prendas de tweed como una chaqueta, y unos zapatos tipo mocasines. Si prefieres un look más moderno, nada mejor que una chaqueta de cuero o de denim para romper con la formalidad del tweed.

+ Vestido de encaje

El encaje es uno de los tejidos más femeninos que existen, y es que suele estar presente en multitud de prendas, tanto en camisas como en chaquetas y, por supuesto, en vestidos. Un vestido de encaje siempre será una prenda especial para eventos formales.

Para lucirlo con estilo deberás pensar muy bien en la ocasión en la que te lo vas a poner. Si se trata de un momento elegante, que requiera cierta etiqueta, combina tu vestido con unos tacones y un bolso de mano. ¿Y para un look del día a día? Unas zapatillas o unos botines, ¡y estarás lista para cualquier momento!

+ Vestido de terciopelo

Durante años el terciopelo se ha colocado en el podio de los tejidos más solicitados de la temporada invernal. Se trata de una tela cómoda y abrigada que, además, denota cierta elegancia y sofisticación a cualquier look, por eso es perfecto para lucir en ocasiones como Navidad o Nochevieja.

Para combinarlo, como siempre, debes fijarte en su color y en el momento en el que vayas a ponértelo. Si quieres un look refinado, prueba a lucirlo con unos pendientes de perlas y un abrigo largo. Para un outfit un poquito más informal, apuesta por unas zapatillas, botines y una chaqueta de cuero o mezclilla.

+ Vestido de lentejuelas

Si bien es cierto que los vestidos de lentejuelas suelen ser de color plateado o dorado, vistos unas líneas más arriba, este tipo de vestidos pueden ser de prácticamente cualquier tonalidad (rojos, azules...). Eso sí, sea cual sea el color escogido, las lentejuelas ya de por sí tienen mucho brillo y destacan, por lo que necesitas un equilibrio en el resto de tu outfit.

Para lograrlo, el mejor truco es llevar por bandera eso de "menos es más". Apuesta por accesorios simples, con pendientes discretos y un bolso pequeño en el mismo color que tu vestido o en una tonalidad un poquito más neutra. ¿Qué te parece la idea? ¡Ya estás lista para brillar!

Looks para combinar un vestido según su forma

Desde la forma imperio o corte A, hasta los vestidos ceñidos, con mangas abullonadas, faldas tubo… Existen muchísimos cortes y formas de vestidos, tantos que pueden parecer innumerables. A continuación nos hemos centrado en dos formas básicas, el camisero y el blazer, para averiguar cómo combinarlos con estilo y triunfar con tus looks.

• Vestido camisero
• Vestido blazer

+ Vestido camisero

Los vestidos camiseros son prendas clave en cualquier fondo de armario, pues te salvarán de más de un "no sé qué ponerme" en tu día a día. Además, son cómodos, prácticos y muy fáciles de llevar, y son muy sencillos de combinar y de adaptar a cualquier tipo de situación.

Para un look de oficina o del día a día, nada mejor que un vestido camisero con unas zapatillas, unos botines o unas sandalias (dependiendo del clima), y un bolso o mochila cómoda. Para un look sofisticado y elegante, lleva tu vestido con unos tacones y un bolso de mano. ¡El mismo vestido puede servirte para varias ocasiones!

+ Vestido blazer

Las tendencias de moda en los últimos años apuntan a que la estética masculina ha llegado para quedarse en el fondo de armario de muchas mujeres. El vestido blazer es solo un ejemplo de ello, pues llegó hace tiempo y lo hizo para permanecer entre nosotras, combinando la elegancia de un blazer con la feminidad de un vestido.

Combinarlo es bastante sencillo, lo único que debes hacer es pensar en el color del vestido y en la ocasión en la que vas a llevarlo. Sea como sea, este tipo de vestido te hará sentir poderosa vayas donde vayas. Puedes apostar por unos pendientes discretos y unas sandalias, o por unas botas altas si tu vestido es más bien cortito.

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