Los turistas peor vestidos: el deterioro de nuestra imagen en vacaciones
Nos preparamos de cara al verano; según va llegando el calor, comenzamos a obsesionarnos con nuestro cuerpo, a sentirnos mal cada vez que arrasamos con la tapita de patatas fritas y a obligarnos a ir al gimnasio. Sin embargo, es irnos de vacaciones y descuidar totalmente nuestra imagen.
Un vestido del mercadillo, sandalias de los chinos, cara lavada y moño mal puesto. Así van muchas mujeres en el día a día. Y mejor no hablar de las pintas de algunos hombres... Pero luego bien que nos reímos de los ridículos turistas con sandalias y calcetines.
Según una encuesta realizada por lastminute.com, los españoles consideran que los turistas peor vestidos son con diferencia los ingleses, seguidos de los americanos, alemanes, chinos, franceses, rusos y japonenes.
Somos bastante críticos con las pintas de los extranjeros que visitan nuestro país en verano, pero, ¿y nosotros? ¿Somos conscientes de nuestro aspecto en vacaciones, sobre todo cuando estamos en otro país? ¿Qué pensarán los residentes cuando nos ven con nuestras pamelas y pareos?
Depilación y traje de baño
Parece que nuestra preocupación se limita sólo a la playa durante el verano, ya que de lo que estamos pendientes es del vello y del traje de baño. Y es que el tema del pelo en el cuerpo no acaba de convencer a casi nadie, sobre todo en el de las mujeres.
Según la misma encuesta, a absolutamente nadie le importa que un hombre lleve el torso sin depilar a la playa o la piscina, y sólo el 5% de hombres y el 8% de mujeres rechaza el vello en la espalda. Sin embargo, ¡que a ninguna mujer se le olvide pasarse la cuchilla antes de salir, sobre todo en las axilas!
También nos volvemos locas para encontrar ropa de baño que nos quede perfecta: ni grande 'tipo abuela', ni excesivamente pequeña. A pesar de que cada vez está mejor visto enseñar cacho en la playa, el bañador y el bikini sigue ganando la batalla al tanga y al topless, con el que no está de acuerdo el 12% de las mujeres y el 5% de hombres.
Para ellos lo mejor es el bañador tipo short (no ajustado). Lo peor, el tanga y, por supuesto, el mankini (bañador con tirantes). El que lo lleve que no se atreva a reírse del guiri con sandalias y calcetines.
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