Cuida el medio ambiente con sencillos hábitos sostenibles

La destrucción del medio ambiente a manos del hombre es una de las cuestiones más debatidas desde hace unos años. El deterioro de la biodiversidad y la escasez de recursos nos recuerdan nuestra responsabilidad para adoptar un comportamiento más ecológico y sostenible. La implicación a nivel ciudadano y gubernamental va cobrando importancia y una de las políticas medioambientales más eficientes es la que se centra en la preservación de la capa de ozono.

La capa de ozono

Desde hace unos cuantos años ya se viene hablando de la destrucción de la capa de ozono. Pero son muchas las personas que no llegan a comprender la importancia de preservar la capa de ozono, por ser un deterioro que no percibimos en nuestro día a día. Sin embargo, la explicación es sencilla y muy contundente. Sin la capa de ozono la vida no sería posible en este planeta en el que vivimos. Parece un motivo suficiente como para que todos nos impliquemos en su recuperación.

La capa de ozono funciona como una especie de escudo o filtro para protegernos de las radiaciones ultravioletas solares. Sin esta capa, las radiaciones ultravioletas esterilizarían la superficie terrestre, por lo que se haría imposible cualquier forma de vida. ¿Has oído hablar del calentamiento global? Pues no es otra cosa que el lento proceso que nos va a llevar a esta situación si no remediamos la destrucción de la capa de ozono.

En este sentido, se han establecido protocolos a nivel mundial, que en mayor o menor medida, cumplen casi todos los países en un intento de frenar el deterioro de la capa de ozono. Los países que cumplen estos protocolos medioambientales se han comprometido a reducir o eliminar determinados productos químicos, especialmente los clorufluorocarbonados (CFC). Sin embargo, los especialistas medioambientales consideran que las políticas adoptadas no son suficientes y que en muchos casos, ni siquiera se cumplen.

Qué podemos hacer nosotras

Ya nos estamos familiarizando con algunos hábitos sostenibles, como el ahorro energético, no derrochar el agua o participar en el reciclaje doméstico. Pero, ¿podemos hacer algo para preservar la capa de ozono? Sí, podemos aportar un cambio en nuestro comportamiento, como no comprar aerosoles que contengan los gases CFC, no utilizar productos con bromuro de metilio en nuestros cultivos, no abusar del aire acondicionado o de la calefacción y mantener dichas instalaciones en buen estado, utilizar bombillas de bajo consumo y reducir el uso del coche particular.

No podemos olvidar que el deterioro de la capa de ozono está ya provocando la desaparición de algunas especies, tanto animales como vegetales, y que el impacto en nuestra salud es ya evidente. El aumento de los casos de cáncer de piel, y de muchas enfermedades oculares, incluso de ciertas infecciones, está directamente relacionado con  la progresiva destrucción de la capa de ozono.

Es de vital importancia tomar conciencia de nuestro grado de responsabilidad individual en la preservación del medio ambiente y en la construcción de una nueva forma de vida más sostenible.

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