Si eres más bien melancólico y lo tuyo es eso de quedarte en casa contemplando cómo el día se consume entre la lluvia... ¡Coge un libro! Es la oportunidad perfecta para acurrucarte en el sofá con la mantita y leer a tus autores favoritos.
Saca tu vena cultureta, ponte al día con la cartelera de tu ciudad y aprovecha para ver los mejores estrenos de cine y teatro. Eso sí, ¡las palomitas que no falten!
Claro que la calle no es el sitio idóneo para hacer deporte si está lloviendo pero, ¿y el gimnasio? Cálzate tus deportivas favoritas, tu modelito 'chic-sport' y ¡a quemar calorías!
Justin Bieber, Los Rolling Stones, tu vecino Pepe y su guitarra, la Orquesta Sinfónica... Cualquiera sirve con tal de no mojarse fuera y pasar un buen rato. ¡Aprovecha!
Enciérrate en un centro comercial y aprovecha para renovar tu armario. No te preocupes si vas sola, allí te encontrarás con tus amigas, tu familia y hasta aquel chico que conociste en las vacaciones de 1997; es el plan más recurrente para estos días...
¿Y si tienes un talento extraordinario para la cocina y aún no lo sabes? Acuérdate de aquellos platos tan sibaritas que pides cuando sales a comer fuera e intenta copiarlos. ¡Siempre es divertido jugar a Máster Chef y experimentar con la cocina!
Nada mejor que acostarte, eso sí, con la ventana abierta y oír como llueve fuera mientras tú estás calentito en tu cama... ¡Qué se inunde la ciudad si es necesario, pero ese buen rato no te lo quita nadie!