Come despacio y disminuye el riesgo de ser obesa

Comer vorazmente y hasta la saciedad, además de hábitos de mal gusto, son dos factores que nos predisponen a la obesidad. Come despacio y mastica bien, son dos de los primeros consejos que damos a nuestros hijos desde que son capaces de sentarse solos a la mesa. Lo atinado del consejo ha sido demostrado recientemente con una investigación realizada en Japón quienes consiguieron probar que cuando una persona come rápido y hasta llenarse, multiplica por tres sus posibilidades de padecer de obesidad.

La distensión gástrica que ocurre luego de cada comida es una de las primeras señales de saciedad que es transmitida por el sistema nervioso vegetativo hasta el hipotálamo, centro regulador que se encuentra en el cerebro. Si consumimos los alimentos muy rápido, no damos tiempo a que se envíe correctamente y terminamos ingiriendo una cantidad mayor de comida.

El apetito, como otros procesos fisiológicos del organismo, está regulado por hormonas. Una de las más importantes es la insulina, pero también ha sido identificada la leptina —se produce en el tejido adiposo y tiene propiedades supresoras del hambre— y la grelina, conocida como la "hormona del hambre" por su función opuesta: aumenta el apetito. Actúa además la colecistokinina, hormona de la saciedad secretada por células duodenales en respuesta a la presencia de alimentos, sobre todo de grasas. Se cree que actúa inhibiendo el vaciado gástrico, lo que contribuye a tener sensación de estar llena.

Conocer sobre estos temas y actuar en función de lo aprendido, es esencial para detener la epidemia de obesidad que se extiende por el mundo debido a malos hábitos alimentarios. Fomentar la educación nutricional es solo el comienzo, pero sin él será imposible remediar la forma insana de comer.

Cómo evitar comer rápido y en demasía

1 - No te saltes los horarios de comida. Evita llegar a la mesa con mucha hambre incorporando entre una y otra cita con la mesa, una fruta o jugo.

2 - Come despacio y en ambientes tranquilos. Es preferible hacerlo escuchando música que mirando televisión.

3 - La masticación es el primer proceso digestivo, elige vegetales y alimentos ricos en fibra que te obliguen a entrenar, lentamente, los múltiples músculos que participan en él.

4 - Demora un poco el postre y verás que terminarás rechazándolo pues te llegará la sensación de saciedad. Los dulces son sabrosos, pero ¡engordan un montón!

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