Mónica Hoyos: 'Me estoy planteando pasar por el quirófano'

Consciente de que su físico es un arma muy importante en su profesión, Mónica Hoyos procura cuidarse para mantener esa belleza exótica y natural de la que le ha dotado la madre naturaleza. Además de encargarse de su hija Luna y de atender sus numerosos compromisos laborales, la guapa peruana, de 34 años, acude regularmente a su centro estético, Instimed.

Precisamente en una de las sedes madrileñas de este centro médico, Mónica nos reveló sus secretos de belleza y nos hizo algunas sinceras confesiones acerca del momento que atraviesa en la actualidad.

DF: ¿cómo empezó tu relación con Instimed y el mundo de la belleza?
Mónica: Empecé a venir a Instimed hace aproximadamente diez años. Entonces solía hacerme limpiezas de cutis y pequeños tratamientos faciales, pero Luisa, la dueña del centro, fue introduciendo nuevos tratamientos cada semana y yo empecé a probarlos. Desde entonces me someto a todos y son una verdadera maravilla.

DF: ¿Cuáles son tus tratamientos preferidos?
Mónica: Todos son estupendos, la verdad. Quizá me hago más tratamientos faciales por cuestión de tiempo, porque los corporales son más largos, pero también son fantásticos. Engordé 25 kilos durante el embarazo, así que después de dar a luz a mi hija me sometí a un tratamiento integral para reducir grasas y reafirmar la piel. Gracias a este tratamiento y a un médico especialista en nutrición que controló mi dieta, recuperé mi peso habitual de un modo muy controlado. Conseguí unos resultados estupendos gracias a todo el equipo; yo sola no hubiera podido conseguirlo.


DF: ¿Cuidas mucho tu alimentación?
Mónica: Gracias al especialista de nutrición tengo muy buenos hábitos alimentarios: No suelo comer mucha grasa, no pruebo los embutidos, bebo mucha agua y como muchos productos orgánicos y naturales. En Instimed me han enseñado a comer bien. Para perder peso no es suficiente hacer una dieta durante dos semanas; se trata de adquirir unos hábitos saludables con los que puedas mantener tu peso y tu salud.

DF: Tu profesión te exige maquillarte muy a menudo, ¿cómo cuidas tu piel?
Mónica: Procuro desmaquillarme muy bien y ponerme las mascarillas Formocompresa. Se guardan en la nevera y se colocan sobre el rostro fresquitas, lo cual es maravilloso porque el frío te descongestiona y te hace conservarte mejor.

DF: ¿Tienes algún truco de belleza casero?
Mónica: Tengo varios: manzanilla en los ojos para descongestionarlos; mascarilla de yogur con miel y agua de rosas para limpiar y tonificar la piel. Me gusta mucho lo natural, por eso adoro los productos de Instimed, porque están elaborados a base de extractos naturales.

DF: Cuidas mucho tu imagen, ¿te has hecho algún retoque estético?
Mónica: Me estoy planteando pasar por el quirófano. Nunca lo he hecho y ahora me lo estoy empezando a plantear. Próximamente seguro que me animo. Soy partidaria de la cirugía. Apoyo a cualquiera que necesite operarse para sentirse mejor con sí mismo.

DF: ¿A qué intervención estás pensando someterte?
Mónica: Tengo varias opciones, pero todavía no me he decidido. Eso sí, seguro que en Instimed me dejan estupenda.

DF: ¿No te da miedo el quirófano?
Mónica: La verdad es que no. Sé que cuando llegue el momento estaré tranquila, porque estoy en manos de los mejores profesionales.

DF: Además de buena alimentación y tratamientos constantes, ¿practicas deporte para mantenerte en forma?
Mónica: Voy mucho al gimnasio y, sobre todo, me encanta bailar. A veces pido que me dejen una sala vacía en el gimnasio para crear mis propias coreografías de salsa y merengue. Podría pasarme horas y horas bailando; no sudo, no siento calor, no me agobio... Me relaja muchísimo bailar y cantar.

DF: Mónica, ¿cuál es la parte de tu cuerpo que más te gusta?
Mónica: Mi sonrisa...

DF: Teniendo un físico arrebatador, ¿lo que más te gusta de ti es la sonrisa?
Mónica: Sí, yo no me veo una mujer espectacular; soy bastante normalita. Además, no soy de las que está venerando su cuerpo todo el día; creo que en esta vida no hay nada que venerar.

DF: ¿Tienes algún defecto físico que detestes?
Mónica: Que lo busquen. Yo me veo muchos, pero no voy a confesar ninguno. Soy muy exigente y crítica conmigo misma, no sólo a nivel físico, sino también a nivel profesional, personal... Soy mi crítica más feroz y eso es lo que me hace ser objetiva y ver las cosas con más claridad.

DF: ¿Cuál es tu principal arma de seducción?
Mónica: Yo no seduzco, casi siempre me seducen a mí... Es cierto, no sé si alguien habrá pensado alguna vez que le estoy seduciendo, pero yo siempre me comporto igual y no soy consciente de ello.


DF: ¿Tu hija Luna es tan presumida como tú?
Mónica: Luna es presumida, pero no tanto. Es una niña, sólo tiene cinco años, y le gustan las cosas típicas de su edad. Es cierto que le gusta echarse perfumes y brillitos, pero ella está más pendiente de los caballos; le fascinan los caballos.

DF: Dicen que cuando uno está bien por dentro, eso se refleja por fuera, ¿cómo está tu interior en la actualidad?
Mónica: Estoy muy tranquila y muy bien. Tengo una actitud muy positiva ante la vida y soy una persona muy risueña. Reírse es una terapia buenísima y a mí me hace falta poca cosa para reírme. Además, soy una persona muy transparente y no puedo ocultar mi estado de ánimo. La expresión de mis ojos lo revela todo; tanto si estoy bien como si estoy mal se me nota enseguida.

DF: ¿Cómo estás en cuestiones de amor?
Mónica: Estoy muy bien y muy tranquila; no voy a entrar en más detalles...

DF: Es inevitable preguntarte por tu relación actual con Cayetano...
Mónica: No voy a entrar en eso ahora. No entré al principio de los principios, hace dos o tres meses, y no lo voy a hacer ahora. No son temas que le incumban a nadie; sólo me incumben a mí y a mi entorno.

DF: Estás siendo muy criticada por no hablar de este tema...
Mónica: Cuando hablas porque hablas y cuando no hablas porque no hablas... Al final si tienen que hablar de ti, van a hablar igual. Muchas veces he sido muy buena persona y he hablado de más con algunas personas por quedar bien con ellas y luego no me he sentido cómoda. Llega un momento en el que haces balance y te das cuenta de que lo importante eres tú misma y si algo no te hace sentir bien hay que saber decir no. No sólo somos personajes, también somos personas... A parte de mi vida sentimental, tengo mil millones de cosas más en la cabeza... No entiendo porque la gente tiene por qué juzgar solamente una foto o una cosa de mí. Eso no me gusta.

DF: Sin embargo, antes no te mostrabas tan reacia a hablar de estos temas...
Mónica: Por supuesto que he hablado de mí misma en alguna entrevista, porque soy dueña de mí misma y de mi libertad. Faltaría más... ¡Hasta ahí podíamos llegar!

DF: Mónica, ¿cómo te ves dentro de diez años?
Mónica: Me veo feliz en todos los aspectos. Seré feliz siendo bailarina, haciendo teatro, una película, dirigiendo un programa de televisión... Lo que esté haciendo da igual, lo que me importa es ser feliz yo viendo feliz a los míos.

DF: Y en el terreno personal, ¿te ves dándole un hermanito a Luna?
Mónica: Sí, me gustaría mucho. Tengo muchas ganas, además Luna quiere hermanitos, o sea que voy a intentar que no sea muy tarde.

DF: ¿Cómo tiene que ser esa persona con la que te gustaría compartir tu vida y darle ese hermanito o hermanitos a tu hija?
Mónica: Pues una persona que me de seguridad, que sea muy segura de sí misma, que tenga principios y ciertas cosas claras en la vida y, sobre todo, que sea muy divertida y me haga reír. Para mí es fundamental que me hagan reír.

DF: ¿Has encontrado ya a esa persona?
Mónica: Uy... qué prisa tengo...

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