¿Qué diferencia hay entre desodorante y anti-transpirante?
La transpiración, también conocida como sudoración, es un proceso de liberación de líquido por parte de las glándulas sudoríparas del cuerpo. Aunque implica molestias para nuestra vida diaria (olor, cerco en la ropa, inseguridad,...) cumple funciones vitales para el correcto funcionamiento del cuerpo humano: Actúa como termorregulador de la temperatura corporal, elimina toxinas que el cuerpo no necesita y protege la piel de agresiones externas.
Las glándulas sudoríparas
Por otro lado, están las glándulas sudoríparas. En el ser humano se distinguen dos tipos de glándulas sudoríparas que difieren por su objetivo y por la composición de su sudor: Las glándulas ecrinas y las glándulas apocrinas.
Las glándulas sudoríparas ecrinas son las más numerosas (2,5 millones) y se localizan en casi todo el cuerpo, pero sobre todo en la palma de las manos, en la planta de los pies, en las axilas y en la frente. Las glándulas ecrinas producen una media de 200 ml de sudor al día. Durante un esfuerzo físico importante o por fuertes calores, esta producción puede alcanzar los 10 litros al día.
Las glándulas sudoríparas apocrinas se localizan en zonas concretas: las axilas, los párpados, el pubis y la zona genital. Sólo están activas en el momento de la pubertad. Son estimuladas por las emoc contienen moléculas orgánicas (lípidos y proteínas entre las que están las feromonas). A causa de las bacterias que transforman estas moléculas, las secreciones de las glándulas apocrinas ocasionan un olor desagradable.
La hiperhidrosis
La transpiración excesiva (o "hipersudoración") es debida a una actividad demasiado fuerte de las glándulas sudoríparas. Se localiza esencialmente al nivel de las axilas, las palmas de las manos, la planta de los pies o de las ingles. El calor, el esfuerzo y el estrés pueden ser factores agravantes. Esta transpiración excesiva se acompaña generalmente de fuertes y desagradables olores. Estos olores incómodos se deben a la degradación del sudor por bacterias que viven en la superficie de la piel e incluso por hongos microscópicos.
¿En qué se diferencian un desodorante y un anti-transpirante?
Los desodorantes son productos que combaten el olor. Tienen propiedades antibacterianas destinadas a impedir la proliferación de las bacterias responsables de los malos olores.
Los antitranspirantes limitan la secreción del sudor; permiten limitar y regular los problemas de transpiración intensa. Los antitranspirantes contienen sales de aluminio que obturan parcialmente los poros, limitando la transpiración.
Un producto innovador
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Además, repele eficazmente la humedad mientras deja a la piel respirar . El MineraliteTM actúa absorbiendo el exceso de sudoración y proporciona una protección duradera que permite la transpiración natural de la piel ya que no obstruye los poros.
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