Arrugas y líneas de expresión: combátelas

Las líneas de expresión, que todas tenemos en mayor o menor medida, son el resultado de un movimiento repetitivo en el rostro. Aunque aportan naturalidad y algunas pueden llegar a resultar atractivas, hay que tener cuidado con ellas, porque con el tiempo las líneas de expresión tienden a convertirse en arrugas.

Por qué aparecen las líneas de expresión

Con el paso del tiempo, el cuerpo reduce la producción de colágeno y por lo tanto, la piel pierde elasticidad. Así, esos gestos continuos que hacemos provocan la aparición de determinadas líneas en el rostro fruto de la pérdida de elasticidad.

Las líneas de expresión se perciben claramente alrededor de los ojos, acentuándose cuando nos reímos, y también en la frente en forma de líneas horizontales. Son frecuentes además en el entrecejo así como en la boca, haciéndose más visibles cuando hablamos.

La principal causa de la aparición de las líneas de expresión es la edad. Los movimientos repetitivos que hacemos y que dejan su huella en nuestro rostro están a menudo relacionados con las emociones. Tanto la risa, como las expresiones de enfado o tristeza van creando esas líneas. Pero como no pretendemos en ningún momento dejar de lado nuestras emociones, tendremos que atacar los demás factores que causan la aparición de líneas de expresión.

Enemigos de una piel lisa

La exposición al sol es uno de los mayores enemigos de nuestra piel porque, además de afectar a los niveles de colágeno, la reseca y por lo tanto, crea un escenario propicio para la aparición de líneas de expresión y arrugas.

La genética también es un factor importante desarrollando pieles más sensibles a la aparición de estas marcas. Por lo tanto es indispensable una buena hidratación diaria que mantenga los niveles de colágeno.

El estado anímico se refleja directamente sobre la piel. El estrés, la angustia, o la depresión perjudican a nuestro sistema inmunológico provocando la aparición de enfermedades y atacando el estado de la piel.

El alcohol, el tabaco y una alimentación escasa en frutas y verduras aceleran el envejecimiento de la piel, por lo que arrugas, manchas y otras imperfecciones harán rápidamente su aparición en el rostro.

Combatir las líneas de expresión

Para retardar lo máximo posible la aparición de las líneas de expresión se aconseja además de una alimentación equilibrada, una rutina de cuidados del rostro minuciosa en la que no deben faltar la limpieza y la hidratación. Utilizar cremas ricas en vitamina A y una exfoliación frecuente ayudará a mantener una piel libre de arrugas. Y se convierte en algo fundamental la protección solar, tanto en verano como en invierno. Las gafas de sol son un aliado importante para las marcas alrededor de los ojos.

Hay algunos recursos naturales que pueden ayudar a combatir las líneas de expresión, como el aloe vera, o las mascarillas caseras a base de plátano, o de papaya o también, de aguacate.

Por su parte la cosmética ofrece modernas técnicas no sólo para prevenir la aparición de esas arrugas, sino para eliminar las que ya han aparecido. Métodos como el peeling químico, la dermoabrasión o el láser están siendo cada vez más utilizados, así como el botox. Sin embargo, no conviene abusar de estos métodos porque pueden provocar cicatrices o un rostro carente de expresión.

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