DIU sin autorización y el proceso correcto para su colocación

Cuando decidimos elegir un método anticonceptivo son muchos los criterios a tener en cuenta. El DIU se ha convertido en una de las elecciones preferentes de muchas mujeres debido a la seguridad y comodidad que ofrece pero, como cualquier otro sistema, su uso incorrecto puede llevar a la ineficacia e incluso resultar en problemas de salud que afecten a la fertilidad de la mujer.

El caso ocurrido en México de una mujer a quien se le colocó el DIU sin autorización ha reabierto el debate sobre este método anticonceptivo, un conflicto en el que se cuestionan tanto los posibles riesgos derivados de esta circunstancias como la violación de derechos que supone haber sometido a la mujer a este proceso sin contar con su autorización.

Cómo comprobar la correcta colocación del DIU

Irma López, indígena mexicana de 28 años, acudió al centro de salud de San Felipe Jalapa de Díaz debido a su avanzado de estado de embarazo. Pese a que se encontraba en pleno proceso de parto no fue atendida ni ingresada por parte del personal médico, y tras decirle una enfermera que “saliera a caminar” terminó dando a luz de forma natural en el jardín del hospital. Sólo entonces acudieron a atenderla, cuando su hijo estaba aún unido a ella por el cordón umbilical.

Además de a falta de atención, Irma López denunció que tras un embarazo anterior los médicos le habían insertado un DIU sin su autorización, práctica que ya se ha denunciado en el país con anterioridad. Debido a la mala colocación del mismo el DIU falló y la mujer quedó embarazada nuevamente. Se trata de una de las razones por las que supone una violación de los derechos humanos, ya que el DIU, pese a ser un método seguro, requiere de supervisión por parte de la mujer, que no puede realizar si se le ha colocado sin su conocimiento.

Para situar el DIU en el cuello uterino se inserta plegado y se abre una vez el ginecólogo lo ha introducido en el cuello uterino, dejando que recupere su forma de T y bloquee el paso de los espermatozoides. Para comprobar que no hay problemas se dejan unos hilos que hay que revisar regularmente para comprobar que se mantienen en su sitio, pues de lo contrario pierde su eficacia además de causar problemas como desgarros e infecciones uterinas.

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