Cómo superar la timidez: métodos para dejar de ser tímida

La timidez puede ser una manera con la cual interactuamos con el mundo, pero también se puede tratar de un rasgo de personalidad. Y si bien no hay nada de malo en ello, en algunas ocasiones ser tímida puede ser realmente agobiante, principalmente cuando intentamos relacionarnos con otras personas.

Si tienes dificultades para expresar lo que sientes o quieres a la hora de establecer relaciones, no te preocupes. En Diario Femenino te ayudamos a conocer cómo superar la timidez con algunos métodos y consejos para dejar de ser tan tímida si eso es lo que deseas.

¿En qué consiste la timidez?

Empecemos por aclarar una duda que frecuentemente surge al hablar de timidez, y es que se la suele confundir con ser una persona introvertida. Ser introvertida responde a tu personalidad, es decir, la manera en la que eres. Si este es tu caso, seguramente disfrutarás de hacer actividades por ti misma, sin compañía de terceros, además de tener un mundo interior muy amplio.

Por otra parte, la timidez es un rasgo de ti, es decir, una cualidad. Ser tímida se puede deber a factores diversos como vivencias pasadas, aprendizajes sociales, tu propia autoestima y autoconcepto… por solo mencionar algunos.

Según algunos autores, la timidez es una tendencia hacia la evitación de participar en interacciones sociales por miedo a fracasar en el intento.

En los casos de timidez queremos tener mayor contacto social (lo que no sucede con las introvertidas), pero no sabemos cómo hacerlo, nos llenamos de dudas y miedos solo ante la idea de interactuar con otros, y eso puede evitar que tan siquiera lo intentemos.

La timidez, ¿nace o se hace?

Hasta la actualidad hay mucha controversia sobre si la timidez nace o se hace, pues algunos especialistas afirman que la timidez es un rasgo que se aprende basado en la interacción con otros y las clases de vínculos que formamos con otras personas. Para ellos, se trata pues, de un aprendizaje social.

Además, también afirman que las situaciones vividas relacionadas con experiencias sociales fallidas, pueden generar temor al respecto, lo que hace que te sientas insegura y evites volver a acercarte a otros para así no volver a experimentar un rechazo.

La manera en la que te percibes a ti misma y qué tanto te conoces y eres consciente de tus cualidades, también juega un papel fundamental en el desarrollo de la timidez.

Por otra parte están los que afirman que ser tímida se trata de algo innato, es decir, que naces siendo tímida, como parte de tu personalidad. Esto lo fundamentan en la existencia de factores neurobiológicos que pueden explicar las capacidades del ser humano para crear nuevos vínculos afectivos.

Aunado a esto, una de sus bases es el hecho de que en la infancia, a una temprana edad, podemos notar que algunos niños son tímidos, siendo esto un indicativo de que no se trata de una conducta aprendida o un rasgo desarrollado.

Lo cierto es que parece haber un poco de ambas hipótesis a la hora de tratar de explicar el por qué algunas personas son tímidas y otras no. 

Consejos prácticos para dejar de ser tan tímida

Ahora que tienes un poco más claro en qué consiste la timidez, es momento de llegar a algunas recomendaciones que te pueden ser de gran ayuda para dejar de ser tímida.

+ Trátate bien 

Puede parecer algo obvio, pero lo cierto es que para las personas tímidas, el fracasar ante un evento social o no intentarlo por miedo puede llegar a ser un tema que nos haga sentir muy mal, incluso durante mucho tiempo.

Y es que es fácil llegar a reprocharte por los errores cometidos, pero hazte la siguiente pregunta: si fuese otra persona la que actuó así, ¿cómo la tratarías? Seguramente tu respuesta no será recriminarle incesantemente su error; entonces, si no lo hago con los demás, ¿por qué ser tan dura conmigo misma?

Aprender a dejar de ser tan tímida tomará su tiempo, y no te preocupes, ya que no se trata de una carrera de velocidad. Si no te sale como esperas las primeras veces, tranquila, es parte del proceso de aprendizaje.

+ La práctica hace al maestro

Las habilidades sociales pueden ser desarrolladas, y esto incluye todo el bagaje que te permite interactuar y establecer relaciones con los demás. Lo que puedes hacer es practicar tú sola, como actuar en ciertos momentos o situaciones.

Una vez que lo hayas hecho varias veces, puedes intentar hacerlo con tu familia o con algunos amigos cercanos, para que vayas adquiriendo confianza en ti misma. Ten en cuenta que esto puede tardar un poco en darse de manera fluida.

Mientras más practiques más fácil será. También ayuda saber la retroalimentación de los demás. Pregunta cómo les pareció tu forma de actuar o si tienen algunos consejos u observaciones sobre algunas cosas que puedes mejorar en el futuro.

+ La observación 

Una de las herramientas más eficaces para mejorar las habilidades sociales y disminuir la timidez es la observación. Permítete observar detalladamente a otras personas en su forma de interactuar o reaccionar a ciertas situaciones que a ti se te vuelven complicadas.

No se trata de que te vuelvas una copia de ellos, simplemente que tomes algunas referencias que puedas aplicar cuando sea tu turno de estar en situaciones similares.

+ Sin pausa pero sin prisa

No te agobies tratando de dejar de ser tímida en poco tiempo. Entiende que cada proceso es diferente y que si las cosas no avanzan tan rápido como tú quieres no significa que estés estancada.

No fuerces el tratar de dejar de ser tímida, pero tampoco decaigas si en algún intento no funciona como esperabas. Un consejo: libérate de las expectativas. No te plantees metas grandes, puedes tener objetivos pequeños, como por ejemplo: saludar hoy en voz alta a mi compañero de al lado.

+ Lo que no decimos, también habla

Presta atención a tu lenguaje corporal, pues en ocasiones decimos más con nuestro cuerpo que con nuestras palabras. Evita cruzarte de brazos o encoger los hombros cuando estás hablando con otras personas.

Y no te olvides del contacto visual. Sabemos que esto puede llegar a ser un verdadero reto para las tímidas, pero trata de ir trabajando en ello. Intenta no mirar tanto hacia abajo y tratar de mirar a los ojos a los demás, aunque sea poco a poco. No te fuerces a tener una conversación completa con contacto visual. Respeta tus ritmos y tiempos.

+ Recuerda: no hay nada malo en ti

Es importante que puedas identificar lo que te sucede al interactuar con otras personas. Tener consciencia de los miedos, temores y actitudes, puede ser de gran ayuda para poder empezar a realizar los cambios que mejoren estas situaciones.

Y recuerda que no hay nada de malo en tu manera de ser; pero si lo deseas, puedes mejorar, respetando siempre tu proceso y siendo amable contigo misma.

Otras situaciones que te pueden producir timidez (y cómo superarla)

Además de los consejos más generales para superar la timidez, habrá situaciones en las que esa vergüenza se convierta en un verdadero reto. Te mostramos algunas de ellas para que puedas superar esa timidez en varios ámbitos de tu vida, como es ir al gimnasio sola o comer en público.

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