Fobofobia: así es el miedo al propio miedo

Que las fobias suponen un problema para desarrollar una vida plena, feliz y saludable es algo que ya sabíamos. Lo que nos sorprende es algunas de las consecuencias de las fobias, esos círculos viciosos que se crean alrededor del miedo y del que parece imposible salir. Pero no es imposible, porque todas las fobias se pueden superar. Descubre en nuestro diccionario de fobias qué es la fobofobia o el miedo al propio miedo.

Qué es la fobofobia

La fobofobia es el miedo al propio miedo, el miedo a sufrir una fobia, el miedo a la ansiedad que produce la fobia. Es una especie de colmo de las fobias, al igual que ocurre con la panofobia, con la que le tienes miedo a todo, porque el estímulo conflictivo es tan general que es imposible de abarcar.

Tener miedo al miedo puede resultar un concepto de lo más poético, pero cuando se sufre este trastorno fóbico no hay nada lírico. Las personas con problemas de ansiedad se pueden hacer una idea de lo que supone la fobofobia porque en mayor o menor media habrán sentido algo parecido.

Ese miedo a sufrir una crisis de ansiedad es muchas veces el causante de la crisis. Lo mismo ocurre con el ataque de pánico, que cuanto más temes experimentarlo, más posibilidades tienes de que te ocurra. La fobofobia tiene un mecanismo parecido. El miedo al miedo es el que atrae el miedo, todo un círculo vicioso.

Síntomas del miedo al propio miedo

Cuando tienes miedo a tener miedo el primer síntoma que aparece es el propio miedo. Luego se van desplegando todo un abanico de síntomas de ansiedad como los mareos, la sensación de irrealidad, la dificultad para respirar, las palpitaciones, el hormigueo en piernas o brazos o incluso el ataque de pánico. Todo por miedo.

Como todas las fobias, la fobofobia es un miedo irracional y desmedido que implica pensamientos obsesivos y distorsionados. La persona con fobofobia tiene miedo a encontrarse en una situación que le provoque miedo y por eso tiende a evitarlo. El problema es que no hay una situación concreta y específica susceptible de provocarle el miedo y las posibilidades se van ampliando hasta llegar al aislamiento.

Causas de la fobofobia

La fobofobia está ligada a otras fobias más conocidas como la agorafobia, el miedo a las multitudes o incluso el miedo a volar. Sufrir fobofobia implica sufrir muchas más fobias pero, ¿cuál es el origen de este miedo al miedo? Aunque también podemos buscar un motivo por condicionamiento de una experiencia traumática, se trata de una fobia tan poco concreta que es difícil llegar a su origen.

La mayoría de las veces la fobofobia se desarrolla por un problema de ansiedad importante en el que la persona ya ha desarrollado una serie de pensamientos obsesivos e irracionales que la llevan a este miedo que ha perdido su función adaptativa para convertirse en una patología.

El mejor tratamiento para una fobia

Todas las fobias se pueden superar, pero en ningún caso se recomienda hacerlo por cuenta propia. La ayuda profesional es necesaria porque las fobias acaban por condicionar completamente la vida de la persona que la sufre y en esa ayuda destaca una terapia entre las demás.

Se trata de la terapia cognitivo conductual, gracias a la cual, la persona que sufre la fobia puede identificar los pensamientos distorsionados que le producen el miedo. Si puede transformar sus pensamientos, también puede transformar la conducta de miedo y de evitación. Pero insistimos en la necesidad de buscar ayuda profesional.

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