Depresión en la adolescencia: claves para superarla

A lo largo de nuestra vida atravesamos momentos difíciles o etapas conflictivas que pueden poner en peligro nuestro equilibrio emocional y conducirnos a una depresión. Una de esas etapas cruciales es la adolescencia, un momento lleno de cambios y confusión que resulta definitivo para nuestra salud mental.

Porque es cierto que la adolescencia suele ser un periodo de problemas, conflictos y desórdenes varios, pero sufrir una depresión siendo adolescente puede abrir el camino para sufrir alguna recaída siendo adulto. Por eso es importante que el adolescente con depresión reciba un tratamiento adecuado no solo para superarla cuanto antes sino para fortalecer su equilibrio psicológico.

Cómo saber si tu hijo adolescente tiene depresión

Pero dadas las características especiales de la adolescencia, a veces es muy difícil determinar si tu hijo adolescente está sufriendo una depresión o su fatiga, su inactividad, su desánimo y sus ataques de llanto e ira son propios del momento vital que está atravesando. Es fundamental estar muy atentas a sus resultados académicos, a sus relaciones sociales y a sus hobbies.

Las causas de la depresión adolescente pueden ser las mismas que en una persona adulta, es decir, la muerte de un familiar, una ruptura amorosa o una enfermedad. Pero a las causas habituales se le suma la posición tan delicada del adolescente en la sociedad, siendo un momento donde necesita encajar en un grupo social, hacer frente a un gran estrés y no falta quien atribuye la depresión adolescente a los cambios hormonales.

En cualquier caso, conviene seguir muy de cerca el estado de ánimo de tu hijo adolescente, teniendo en cuenta la distancia que habitualmente separa a los padres de los hijos en esta época. Si no quieres vivir totalmente al margen de la vida de tu hijo en la adolescencia vas a tener que llenarte de paciencia y comprensión y encontrar el equilibrio entre la complicidad y la disciplina.

Superar la depresión en la adolescencia

Remarcamos la importancia de distinguir entre los síntomas de una depresión y las actitudes propias de un adolescente porque nos parece muy importante recibir el tratamiento para la depresión a tiempo, dado que el riesgo de exclusión social, de sufrir en un futuro trastornos emocionales graves y hasta de suicidio es muy elevado.

Hasta cierto punto son normales los cambios de amigos en la adolescencia, sentirse un poco perdido, tener cambios bruscos de humor y experimentar con las drogas. Pero cuando a eso se le suma una baja autoestima, una visión muy pesimista de la vida y otros síntomas como el insomnio o la fatiga, es el momento de acudir a un especialista.

Sin descartar el tratamiento farmacológico, superar una depresión en la adolescencia irá ligado a la psicoterapia, ya que será el psicólogo quien mejor dotará al adolescente de las recursos necesarios para afrontar y superar los problemas en ese momento, pero también cuando llegue a adulto.

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