Las 12 uvas y las campanadas, ¿de dónde viene la tradición?

Las navidades se acercan y quién dice días festivos, preparativos y tiempo en familia, dice también tradiciones. Y a todo esto, lo de las 12 uvas y las campanadas, ¿de dónde viene? Seguro que tú también te lo has preguntado en alguna ocasión ¿verdad? Pues bien, resulta que hay dos posibles teorías que tratan de explicar el origen de esta arraigada tradición de fin de año ¿quieres descubrirlas? ¡Aquí las tienes!

¿Por qué se comen 12 uvas en Fin de Año?

En prácticamente todos los hogares españoles se comen las 12 uvas al son de las campanadas para despedir el año que se va y recibir al Año Nuevo. Costumbre que se ha extendido también a países como Chile, Portugal, Perú, Venezuela, México o Ecuador. Y es que, que ese momento de transición entre lo viejo y lo nuevo, quede marcado por el protagonismo de las uvas, se ha convertido en todo un ritual para atraer la buena suerte que pocos se quieren perder. 

El ritual de las 12 uvas, que no se sabe muy bien si representan las 12 campanadas o los 12 meses del año, quizás ambas cosas, ha tenido tanto éxito que no hay familia que no lo practique en Nochevieja, junto con otras tradiciones como el llevar algo rojo (la ropa interior, el vestido…), o la de meter un anillo en la copa con la que brindamos con nuestros seres queridos. 

Las dos teorías sobre el origen de la tradición de tomar las 12 uvas

Antes de que "nos den las uvas" y llegue el momento de brindar juntos, abrazar a la familia y amigos y de decir aquello de "feliz y próspero Año Nuevo" conozcamos cuáles son las dos teorías que tratan de explicar el por qué y el origen de este ritual de Nochevieja que cada vez cuenta con más seguidores. 

1 El excedente de uvas 

¿Y si te contamos que a pesar de ser toda una tradición no cuenta con tantos años? Tomar las que dicen que son las 12 uvas de la suerte no es una tradición ancestral, si no una más bien moderna. 

No hay acuerdo sobre el origen de este ritual de Nochevieja, aunque sí que es cierto que la mayoría de las teorías sitúan el año 1909 como el inicio de las 12 uvas de la suerte como es el caso de la teoría del excedente de uvas. 

Parece ser que los productores de uvas de Alicante (España) se encontraron con un excedente en la cosecha aquel año y en una jugada perfecta de marketing casi prehistórico instauraron este curioso gesto como costumbre establecida hasta día de hoy. La variedad de uva blanca Aledo se instauró entonces como la que había que tomar en fin de año. Tanto es así que los puntos de venta no tardaron en ofrecerla en paquetes de doce ya preparados para tomar.

2 'Las uvas bienhechoras' 

Aunque el asunto del excedente de uvas es la teoría más aceptada, no podemos obviar algunas noticias en diarios de la época en las que ya se hablan de 'las uvas bienhechoras' en el año 1894. De hecho, la creencia popular afirma que esta teoría pudo ser en verdad la impulsora de la del excedente de uvas. Las informaciones al respecto se refieren a la costumbre de algunas familias de la burguesía madrileña de comer justo 12 uvas durante las campanas en fin de año, comentan además que se trataba de una costumbre importada de las clases altas de Francia y Alemania. 

También era costumbre que brindaran con champán para despedir el año. Sea como sea, las lenguas cuentan que el ritual se popularizó rápidamente después de que en 1930 algunos madrileños vieran al mismísimo Alfonso XIII comerse las uvas en la Puerta del Sol.

Y es que, en Madrid, los ciudadanos de a pie decidieron por aquellos años reunirse en la Puerta del Sol para escuchar las campanadas del reloj cada fin de año (una fruta barata accesible al bolsillo de casi todos) como forma de protestar contra la riqueza de la nobleza. El carácter burlesco de esta costumbre se mantuvo durante años para pasar poco después a ser el ritual familiar que conocemos hoy en día. 

El simbolismo de las uvas por Nochevieja 

¿Y por qué las uvas y no otra fruta? Por su tamaño reducido y su facilidad de tomar 12 por los 12 meses que están por llegar y que se esperan sean de buena suerte. Por eso es que se dice que tendrás tantos meses de buena suerte por cada uva que logres comerte a cada campanada. 

Pero esta no es la única razón por la que se elige las uvas en muchos países. Desde la antigüedad siempre ha sido una fruta muy apreciada por su sabor dulce y delicioso, por sus propiedades nutricionales, son ricas en antioxidantes, fibra, hidratos de carbono y vitamina C, si no también por su gran simbolismo relacionado con algunas de las cosas que más deseamos tener en la vida.

- El dios del vino, Dionisos o Baco, fue el primer viticultor que siempre acudía a las bacanales con un racimo de uvas para acompañar el vino. Y no, no era casualidad, las uvas simbolizaban la fertilidad, la prosperidad, la abundancia y la generosidad. Por otro lado, debes saber que las uvas estaban muy relacionadas con la transformación. Un cambio que experimentaban las bacantes en las fiestas dionisiacas. La misma que experimentamos hoy en día durante las 12 campanadas.

- A su vez, la uva blanca es un fruto que se asocia con otros símbolos positivos como, por ejemplo, la unión, la fraternidad, la alegría y la dicha sobre todo en honor al dios Baco. 

Tradiciones de Nochevieja en diferentes países del mundo

Suenan los cuartos, todos preparados y, cuando comienzan las doce campanadas, nos llevamos las uvas a la boca tan rápido como podemos teniendo cuidado de no atragantarnos. ¿Sabías que la tradición también cuenta cómo hay que preparar las uvas de la suerte?

En España y otros países latinoamericanos las 12 uvas se ponen en un recipiente individual y se colocan delante de cada comensal. Se dice que se han de tomar tal cual, pero bien sabemos que cada vez son más los que le quitan la semilla e incluso la piel.

En cuanto a las tradiciones que siguen en otros países, una de las más conocidas es la italiana de tomar lentejas como forma de desear a los presentes y a uno mismo prosperidad económica mientras que en Japón cambian las legumbres por los fideos. En Dinamarca rompen la vajilla tras la cena como señal de afecto a familiares y amigos. 

En Grecia se suele tomar un pastel llamado Vassilopitta en cuyo interior se poner una moneda de oro ¡buena suerte para el que la encuentre! Y todo ello sin olvidarnos de los besos de Nochevieja en Estados Unidos, de la tradición china de pintar de rojo las puertas de las casas, de la costumbre de los chilenos de barrer y pasearse con una maleta por casa y del acto de tirar agua que suelen hacer en Uruguay cada vez que se acaba el año. 

Y tú, ¿te tomas las 12 uvas de la suerte en Nochevieja?

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