Jennifer Aniston no lo pasó nada bien tras divorciarse de Brad Pitt. Pero el matrimonio tampoco fue un camino de rosas. Y es que la actriz pasó una fase incómoda a los 30 años. Pero eso es agua pasada, y ahora vuelve a disfrutar de la juventud como lo hacía a los 25.

No hay que olvidar que lo que envejece es el cuerpo y que siempre se es joven de espíritu. Eso es lo que le ha pasado a Jennifer Aniston, que a sus casi 45 años se siente mucho más confortable y feliz que en otras etapas de su vida.

"No tenía preocupaciones importantes en los 25, todo comenzó en los 30, en mi fase incómoda", comentaba para ‘Parade’ la actriz. Una fase que coincidió con su matrimonio con Brad Pitt. Ambos fueron protagonistas de varias portadas y rumores hasta su separación en 2005. Cinco años de matrimonio que no fueron los mejores para ambos.

Jennifer Aniston, enamorada de la vida… y de Justin Theroux

A los 44 años, Jennifer se encuentra en "una flor de la vida tardía", como confiesa la propia actriz para la revista. Ella sigue con su romance con el actor y guionista Justin Theroux y sus planes de boda intactos, mientras que su exmarido vive un idílico romance con la actriz Angelina Jolie.

Brad Pitt y ella no cuajaron como buen matrimonio y eso les hizo sentirse incómodos. Pero nueve años después de su divorcio, la actriz ve las cosas de diferente modo. "Dicen que la juventud se desperdicia cuando eres joven, pero yo me siento tan joven ahora. Incluso mucho más que cuando tenía 25 años, me encuentro bien conmigo misma. Estoy centrada. Me siento muy, muy afortunada", añade Jennifer.

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