Vestidos para una fiesta de día: ideas para un cóctel, una boda...

No es lo mismo ir a una fiesta de noche que a un evento de día. Si estás invitada a un cóctel, una comida formal, una presentación o una boda que se celebra por la mañana o por la tarde, no es necesario acudir con vestido largo o con una etiqueta muy formal. Generalmente, en la invitación al acto te indicarán la indumentaria que has de llevar, en caso contrario, te serán muy útiles estos consejos para vestir en una fiesta de día.

Cómo vestir en una fiesta de día

Lo más importante es que vayas acorde con la ocasión para que no te sientas ni excesivamente arreglada ni demasiado informal. Cada acto requiere un estilismo diferente.

La diferencia entre una fiesta de noche y otra de día, como puede ser un vestido de cóctel o un traje de boda que se celebra por la mañana, es que el vestido puede ser corto. El largo por encima de la rodilla es el más adecuado, aunque también puedes llevar un largo por la rodilla o a media pierna o incluso un vestido de corte minifaldero, siempre sin excesos, ya que los vestido muy cortos están reservados para otras ocasiones como bailes en discotecas.

En cuanto a los colores, para un acto de día, puedes evitar el negro y arriesgar un poco más con diferentes colores, preferiblemente claros. Puedes aprovechar el momento para utilizar vestidos estampados o de vivos colores, trajes con capas o vuelo en la zona de la falda. Evita los brillos y lentejuelas, más adecuados para la noche.

Si tu presupuesto para el vestido de día es ajustado, puedes comprar uno sencillo en cualquier tienda y añadirle detalles especiales como unos buenos tacones, un tocado y un bolso pequeño o clutch. Los complementos son, muchas veces, los que marcan la diferencia. Si el vestido es de colores llamativos o estampados, éstos han de pasar más desapercibidos, pero si el vestido es discreto, puedes aprovechar la ocasión para destacarlo con unos buenos complementos o joyas.

En caso de que la fiesta sea en otoño o en primavera, resulta ideal complementar el vestido con una chaqueta corta, torera o bolero. Para el invierno, no te queda más remedio que usar abrigo si no quieres helarte, eso sí, intenta que el largo sea mayor que el de tu vestido.

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