Vestidos de verano: cómo vestirse cómoda, fresca y guapa

Con la llegada del calor y la subida de las temperaturas, guardamos abrigos, botas y jerséis. Dejamos atrás los tejidos de lana y punto y decimos adiós a los colores grises y marrones para dar la bienvenida a las telas vaporosas, los vestidos ligeros y los colores cálidos y llenos de luz.

Ideas para vestir en verano

Los vestidos son una de las prendas más cómodas para el verano. Se trata de una indumentaria no sólo adaptable a los diferentes estilos sino que es válida para altas, bajitas, gorditas y delgadas. Hay un vestido de verano ideal para cada mujer.

Los vestidos nos ayudan a ir fresquitas y nos dan una apariencia muy dulce y femenina. Los tejidos de los trajes nos permiten pasar un verano caluroso de una forma más cómoda. Las gasas, sedas o telas de algodón son perfectas para pasar un poco mejor los rigores del calor.

Para la noche, son glamurosos y elegantes los vestidos sin mangas o escote asimétrico. Son ideales los vestidos cortos y ceñidos para fiestas informales como cenas o salidas a discotecas con amigos. Si acudimos a una fiesta de noche podemos adaptar un sencillo vestido ligero con algunos complementos que para darle un aire más formal, unas sandalias de tacón alto y collares y pulseras más exagerados compondrán un total look perfecto.

Sin embargo, para un look playero o casual para el día, encaja perfectamente un sesentero vestido largo con estampados, un aire hippie que siempre es tendencia. Nunca pasan de moda en verano los vestidos ibicencos, la moda adlib triunfa en todo el mundo y aporta un look romántico con un toque retro ideal tanto para la noche como para el día.

Los vestidos son un básico en el armario de verano: con volantes, trajes estampados, vestidos vaporosos o ceñidos. Los trajes en verano nos aportan un look muy chic y nos hace lucir deslumbrantes.

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