Protege tus manos y uñas del frío

Nuestras manos son una de las partes más expuestas de nuestro cuerpo y por ello, debemos mimarlas y protegerlas del frío.

Las bajas temperaturas, el viento y otros agentes externos pueden hacer que nuestras manos y uñas se resequen y deterioren en exceso, haciendo que se agrieten y sufran.

Afortunadamente, contamos con distintos tratamientos que hacen que nuestras manos y uñas se mantengan suaves y cuidadas.

La hidratación diaria de nuestras manos es crucial para mantenerlas sanas y sedosas. Además, el uso de guantes por la calle y cuando utilizamos productos de limpieza, paliarán los efectos secundarios que el frio y los agentes químicos pueden provocar a la larga, como el envejecimiento prematuro de la piel.

A parte de estos consejos básicos, hay otros tratamientos extras que son muy aconsejables que realicemos.

Cuidados extras para unas manos saludables y sedosas

Lo ideal durante el invierno es realizar una vez a la semana, un tratamiento exfoliante que limpiará las impurezas y abrirá los poros, para recibir después un tratamiento a base de parafina, que hidratará nuestras manos en profundidad.

No sólo la piel de nuestras manos se ve afectada con el frío si no también nuestras uñas y la piel que las rodea. Cuando las uñas se resecan, se agrietan y pueden quebrarse con facilidad. Si esto ocurre, tus uñas estarán pidiendo a gritos un tratamiento hidratante en profundidad.

Para evitarlo, el uso diario de distintos aceites como el aceite de oliva o de almendra, darán a tus manos y uñas los nutrientes esenciales y vitaminas para mantener tus manos sanas y fortalecer las uñas.

Siempre que nos hagamos la manicura, debemos aplicar primero una capa base que proteja nuestras uñas de la pigmentación de los esmaltes, los cuales pueden hacer que la uña se debilite y deshidrate.

Según tu tipo de uñas, encontrarás distintos tipos de bases: para uñas blandas, secas, normales… elige la que más se adecúe a tus necesidades.

Recuerda siempre cuando te hagas la manicura, no aplicar ningún producto oleoso hasta después de aplicar el esmalte ya que si lo haces antes, las uñas no cogerán el pigmento.

Siguiendo estos sencillos tratamientos, mantendrás tus manos y uñas libres del daño que los agentes externos pueden causar, además de darles el tacto suave y delicado que tus manos necesitan.

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