Cómo maquillarse con polvos de sol o bronceadores: el maquillaje del verano

El verano es el tiempo del bronceado. Sin embargo, no todas tienen la suerte de disponer del tiempo o la capacidad de ponerse tan morenas. Además, ya se sabe que un exceso de sol, especialmente si no has tomado precauciones, puede ser muy dañino para la piel. Pero no hay por qué preocuparse porque siempre tendremos a nuestro aliado en el verano: los polvos de sol. Te contamos cómo maquillarse para parecer más morena con unos polvos bronceadores.

Con el calor y el sudor es normal que el maquillaje no dure nada de tiempo. Si tras extender la base de maquillaje te aplicas unos polvos bronceadores, o incluso traslúcidos, ayudarás a que se fije tu maquillaje. Aunque los polvos de sol se suelen utilizar como colorete, si los extiendes y difuminas adecuadamente puedes cubrir toda tu cara. La gama de tonos de los polvos bronceadores es variada ya que cada piel pide un color distinto. Si tu tez es blanquecina apuesta por los tonos rosados, mientras que si eres morena te quedarán mejor los bronces.

En cualquier caso, en verano se llevan los maquillajes naturales y frescos. Las bases para el rostro tiene que ser ligeras para que tu piel pueda respirar. Incluso, puedes aplicar los polvos de sol directamente sobre la piel desnuda.

Los polvos de sol te harán parecer más morena

Es importante que no te pases en la cantidad de producto que te aplicas en la cara si no quieres que parezca que te has maquillado con zanahoria triturada. Uno de los principales motivos por los que al final pareces tan maquillada es que llenas demasiado la brocha con los polvos. Lo ideal es tocar solo una vez el cosmético antes de aplicártelo en el rostro. Si acaso consideras que no es suficiente, repite la acción tantas veves como quieras. Si coges poco a poco los polvos bronceadores podrás controlar mejor cuánto te echas.

Para aplicar los polvos es conveniente tener la brocha adecuada. Las que son grandes y suaves son menos agresivas con la piel. Maquilla con más insistencia las zonas de la frente, nariz y mejillas dado que son las zonas en las que suelen durar menos los cosméticos. Es importante que difumines bien los brochazos para conseguir un aspecto más natural y evitar el antiestético efecto careta. Lo bueno de los polvos bronceadores es que también te los puedes aplicar fácilmente por el cuello y pecho para conseguir un moreno como si hubieras estado horas al sol.

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