Cómo cuidar la piel en verano

Verano es sinónimo de sol, playa y piscina...pero también de problemas para tu piel. En los meses de calor nuestra cara está sometida a un ataque constante por parte del viento y del sol, que actúan con mayor fuerza para acentuar problemas de arrugas y manchas, por no hablar del riesgo que supone el cáncer de piel.

Por ese motivo, la vacaciones no son momento de olvidarse del cuidado facial, sino todo lo contrario. Unas buenas rutinas son la mejor respuesta y prevención para conseguir que la piel siga perfecta cuando termine el verano. Para ello debemos modificar un poco nuestras costumbres y adaptarlas a la nueva situación.

Cómo cuidar la cara en verano para evitar las manchas

La cara siempre está expuesta a las agresiones externas, y aún más en verano. Por eso la hidratación se convierte en una de las claves para evitar problemas. Usa cremas hidratantes ligeras y absorbentes, adecuadas a tu tipo de piel pero menos densas que las usadas en invierno, a ser posible con base acuosa. Además, llévala siempre en el bolso para poder volver a aplicarla de vez en cuando.

Otra de las claves es la protección solar. Es conveniente usarla durante todo el año, pero más que nunca en esta época. Elige cuidadosamente la crema protectora adecuada según tu tono de piel, aplícala media hora antes de salir de casa y vuelve a aplicarla cada dos horas o después de bañarte en la playa o piscina, incluso si la crema es resistente al agua.

Por último, no dejes de lado tu rutina de limpieza facial diaria, es especialmente importante que continúes realizándola dos veces al día, mañana y noche, incidiendo en zonas más delicadas como los labios o el contorno de los ojos. Además, la aplicación de mascarillas te ayudará a mantener la piel hidratada y prevenir la aparición de manchas.

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