Vivir y trabajar en pareja: pautas para sobrevivir

A la búsqueda del secreto de las relaciones de pareja, nos damos perfecta cuenta de que los posibles escenarios son tan variados como parejas. Si hay quien echa de menos a su pareja porque apenas se ven, no falta quien se echa de más por pasar todo el día juntos. Vivir y trabajar en pareja: cómo sobrevivir.

Cuando vives y trabajas con tu pareja

Obviamente el mundo está mal repartido cuando hay relaciones a distancia que apenas se ven y parejas que pasan las 24 horas del día juntos porque trabajan en el mismo lugar. Una situación que lejos de ser ideal puede provocar infinitos problemas de pareja y agotamiento amoroso. Vivir y trabajar juntos no es la panacea del amor, pero se puede sobrevivir.

No es saludable desde ningún punto de vista pasar todo el día con tu pareja, algo que no se puede evitar tan fácilmente si trabajáis y vivís juntos. ¿Qué le vas a contar al final del día a tu pareja si ya sabe todo lo que has hecho hasta el mínimo detalle? ¿de qué vais a hablar antes de ir a la cama? Desde luego de trabajo no, esa es la principal norma de una pareja que comparte casa y trabajo.

El trabajo no se lleva a casa y la pareja no se lleva al trabajo podría ser el lema de estas parejas condenadas a ser siameses. Pero ahora toca resolver el tema del ocio. ¿juntos o por separado? Por lo general las parejas disfrutan juntas de su tiempo de ocio, compartiendo intereses y amigos, pero en este caso conviene delimitar espacios y tiempos. La independencia en pareja se hace aquí más necesaria que nunca.

No descuides a tu familia ni a tus amigas, cuídalas como un tesoro que no tienes por qué compartir siempre con tu pareja y reserva también momentos para ti sola. Compartir experiencias en pareja es un ejercicio muy saludable, pero no tener una vida propia puede llevarte a la dependencia emocional o a un desgaste de la relación por agotamiento.

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