Las peores excusas para rechazar una cita

Ya sabemos que no todas las citas dan como resultado una relación de pareja. Y también sabemos que algunas primeras citas nunca tienen lugar porque te has arrepentido a tiempo. Cuando no estás muy convencida de si acudir o no a esa cita, sigue tu instinto y cancela. Nos han contado las peores excusas para rechazar una cita. Son terribles, pero funcionan.

Las peores excusas para rechazar una cita

Lo ideal cuando quieres rechazar a alguien o cuando quieres cancelar esa primera cita es que vayas con la verdad por delante y dejes las cosas claras, pero sabemos que hay momentos en que la claridad no sirve y el chico insiste e insiste y tú ya no sabes qué decirle para que entienda tu negativa. Para esos casos en los que tu buena educación no funciona, tenemos algunas excusas terribles pero efectivas.

1 Tengo que llevar a mi perro al psicólogo. Si tu perro está deprimido o tiene problemas de comportamiento, hay que llevarle al psicólogo. Lógicamente tu mascota está por delante de cualquier cita y eso lo entiende hasta ese chico pesado que no capta tus indirectas.

2 Parece que va a llover. No puedes quedar porque va a llover, así que mejor canceláis la cita y lo dejáis para un día que no llueva, que no haga calor, tampoco frío. Y mucho menos si hace viento.

3 No encuentro niñera para mis hijos. Esta excusa es devastadora sobre todo si en vuestras conversaciones por chat antes de la cita le has dicho que no tienes hijos.

4 Mi marido ha vuelto de viaje. Mira, que te ha surgido un imprevisto porque tu marido ha vuelto de viaje. Sí, ese marido al que se te olvidó mencionar. Pero se lo estás diciendo ahora, que nunca es tarde para una buena información.

5 Mi abuelo ha muerto. Está muy feo inventarte la muerte de un familiar, especialmente la de tu abuelo, que lleva muerto desde antes de que tú nacieras pero es una de las excusas más utilizadas para escaquearte de una cita.

6 La lavadora se ha estropeado y te ha inundado todo. Hasta el piso del vecino. Menudo estropicio y menuda temporada de reformas y papeleos, va a ser mejor dejarlo para más adelante.

7 Estoy intentando atrapar la serpiente del vecino. Tú tienes un perro, pero tu vecino que es muy original, tiene una serpiente y se le ha escapado. Lógicamente no puedes salir de casa hasta que deis con el paradero del animal.

8 Es el cumpleaños de mi abuelo. Sí, bueno, el mismo abuelo que había muerto en una excusa anterior ahora cumple años. Un evento familiar de esas características es motivo más que suficiente para rechazar una cita.

9 Me he roto la pierna. Si te has roto la pierna, no hay manera de que vayas a la cita. Porque estás de reposo, claro. Es una pena, por supuesto, pero quizás deberías suavizarlo con un esguince, ¡por si te ve por la calle corriendo para coger el autobús! 

10 Estoy en comisaría. Excusa de última hora que hará que ese chico no te vuelva a llamar. Estás en comisaría, estás metida en un lío, pero ya le llamarás otro día.

Y tú, ¿qué excusa absurda has puesto para rechazar una cita?

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