En el amor... ¡sé tú misma!

Estás literalmente encantada con tu nueva relación de pareja y tus amigas te miran con recelo. No es envidia, no, es porque están asustadas del cambio que se ha producido en tus costumbres, en tus gustos y en tu personalidad. Te contamos por qué no debes cambiar tus gustos al tener pareja. 

Be happy, be love, be yourself

Puede que después de una temporada disfrutando de las ventajas de ser soltera e independiente haya algunas cosas que no quieras hacer ahora que has encontrado una nueva pareja. Puede también que los gustos de tu nueva pareja sean tan diferentes a los tuyos que te resulte muy atractiva la idea de enriquecerte con experiencias nuevas. Hasta ahí todo va bien.

La cosa se tuerce cuando de repente dejas de hacer cosas que te gustan solo porque a tu pareja no le interesan, porque no las crees compatibles con tener pareja o porque intuyes que a tu pareja no le sentarán bien. Tenemos un problema de aficiones, de intereses, pero no podemos convertirlo en un problema de sumisión o de falta de independencia. Tú eres tú, tus circunstancias y tus gustos, no lo olvides.

Mientras tus gustos y los de tu pareja no se enfrenten y sea algo irreconciliable, no debería haber conflicto ni generar discusiones de pareja. Tu pareja no debería centrar tu vida y por eso es importante que mantengas un espacio propio, un tiempo propio para disfrutar a tu manera de lo que te gusta. Sí, los gustos de tu pareja son increíbles, son interesantes y hay que respetarlos. Y los tuyos también.

Insistimos en la cuestión de los gustos porque hay personas que se quedan abducidas durante la etapa del enamoramiento. Y una vez que se pasan las mariposas se dan cuenta de que han abandonado todas sus aficiones por dedicarse a adorar a su objeto amado y a todo lo que venía con él. No te desprendas de nada personal en el camino del amor. Porque si no te quiere con tus gustos, es que no te quiere bien.

Ten en cuenta algunos aspectos que derivan de cambiar tus gustos por amor, porque pueden llegar a ser peligrosos:

1 Amistades. No dejes de quedar con tus amigas por tener pareja, no puedes perder tu círculo social por amor. El amor siempre suma, nunca deber restar.

2 Personalidad. Al cambiar tus gustos cuando tienes pareja, estás debilitando tu personalidad. No pasa nada por adquirir aficiones nuevas y enriquecerse en todos los ámbitos de la vida, en eso consiste conocer gente, pero no te olvides de quién eres.

3 Aficiones. Es normal introducir algunos cambios cuando empiezas una nueva relación, pero no dejes todas esas cosas que te hacen feliz por adaptarte a las de tu pareja.

4 Ropa. Resultaría muy alarmarte que cambiases radicalmente de estilo por tu pareja. Tanto si siempre vas sexy y apabullante, como si siempre estás cómoda y lista para la aventura, tu pareja tiene que respetar también tu estilo.

5 Cuestión de organizarse. Los gustos se pueden compartir y también repartir el tiempo de ocio de forma equilibrada para compaginar ambos caracteres. Al fin y al cabo, el verdadero secreto de una pareja feliz es el equilibrio.

¿Que, te unes a nuestro slogan En el amor, ¡sé tú misma?

Puedes leer más artículos similares a En el amor... ¡sé tú misma!, en la categoría de Pareja en Diario Femenino.