Cómo saber que ya no merece la pena un hombre

Pocos amores son para siempre, por eso las relaciones de pareja están envueltas en sobresaltos, dudas y finales amargos. Y es que la pareja va evolucionando, al igual que las personas, pero no siempre evolucionamos en la misma dirección. Puede que después de un tiempo, ese hombre ya no merezca la pena. Te damos las claves para saber si merece la pena o no.

Señales de que ese hombre ya no merece la pena

Es por todas conocida esa transformación de príncipe a sapo que sufren la mayoría de los hombres. Si bien sabemos que no necesitamos un príncipe, también tenemos bien claro que no queremos un sapo en nuestra vida. Pero no siempre es fácil detectar el cambio y no nos damos cuenta hasta que la metamorfosis se ha completado. Tenemos algunas señales de que ese hombre ya no merece la pena.

1 Whatsapp. Hasta que el mundo vuelva a dar otro de sus giros, seguiremos insistiendo en la importancia del Whatsapp en el amor. Ese hombre que antes te prestaba atención continuamente a través de Whatsapp y que ahora tarda siglos en contestarte, es un hombre que está empezando a no merecer la pena. Sigue atenta.

2 Conversación. Puede que nunca hayas tenido apasionantes conversaciones con ese hombre, pero si de un tiempo a esta parte él ya ni siquiera se molesta en tener una charla amena, debes estar atenta porque es un signo de su transformación en sapo.

3 Detalles. Cuando os conocisteis era el tipo más detallista que te habías encontrado en la vida, incluso tenía un punto romántico. Pero con el paso del tiempo se ha convertido en un cromañón insensible que es incapaz de recogerte una flor del parque de camino a casa. Sospecha, sospecha, porque tal vez su carácter detallista solo era una estrategia de conquista.

4 Discusiones. En una discusión de pareja se pueden decir muchas cosas desagradables, se puede elevar el tono y hasta se pueden hacer reproches de los que más tarde nos arrepentiremos. Pero un hombre que merece la pena nunca atacará tus puntos débiles en una discusión y nunca te faltará al respeto.

5 Sexo. Dicen que la convivencia mata la pasión. La convivencia, la rutina o el paso del tiempo pueden espaciar vuestros encuentros sexuales, pero no restarles intensidad. Si últimamente hacéis el amor porque toca y no porque sintáis unas ganas irremediables de estar dentro el uno del otro, es que algo falla.

6 Planes. Hubo un tiempo en que parecíais siameses, siempre juntos a todas partes. Ahora él ya no quiere quedar con tus amigas, se escaquea de las comidas familiares y además te convence para que salgas con tus amigas en lugar de con él. Si llega el momento en el que planea las vacaciones con sus amigos y no tiene intención de incluirte, es el momento de replantearte la validez de ese hombre.

7 Risas. Es fundamental para la buena marcha de una pareja que haya risas. Si antes te morías de la risa con él, si él se carcajeaba de tus ocurrencias y ya hace tiempo que no escuchas el sonido de su risa, tal vez su sentido del humor era una estrategia para conquistarte.

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