Cambio de roles: cuando tú te conviertes en suegra

Llevas tantos años quejándote de tu suegra entrometida que no te has dado ni cuenta de lo rápido que pasa el tiempo. Tus hijos han crecido, se han convertido en adultos y el drama no es que algún día te conviertan en abuela, sino que ya te han convertido en suegra. ¿Cómo ha ocurrido? ¿qué broma macabra te ha convertido en suegra? Debes aceptar la situación cuanto antes.

Ahora tú también eres suegra

No sabes muy bien cómo ha podido ocurrir, porque ayer tenías unos adorables niños que jugaban en el parque y hoy te traen a casa a su pareja. Asúmelo, te has convertido en suegra. No es un drama, siempre y cuando no te conviertas en tu propia suegra. Sin embargo, ahora podrás entender algunas de esas actitudes malignas de la madre de tu marido.

Porque sin querer, te verás escudriñando al novio de tu hija en busca de señales que indiquen que es un hombre tóxico. Le mirarás desde todos los ángulos, le harás preguntas tan personales que se sentirá incómodo. Pero tú quieres saber, quieres saberlo todo de ese hombre del que tu hija se ha enamorado y que seguro, seguro, os dará más de un disgusto.

O, también sin querer, te encontrarás juzgando a la novia de tu hijo. No te parecerá suficiente para él, no tendrá suficientes estudios aunque sea neurocirujana y no la verás lo suficiente enamorada de tu niño como para que tu pequeño no sufra. Son las lecciones que te da el Karma, vas por el camino de convertirte en una suegra insufrible. Porque ahora tú eres la suegra.

Pero puedes parar este despropósito a tiempo. Puedes llegar a ser una suegra bonita de esas que tanto te hubiera gustado tener. De esa forma nunca tendrás una mala nuera ni un mal yerno, tan solo parejas que vienen y van en la vida de tus hijos. Y no pierdas de vista que tu única función en la vida de tus hijos ahora que son adultos es apoyarles en sus elecciones y consolarles en sus equivocaciones.

Puedes leer más artículos similares a Cambio de roles: cuando tú te conviertes en suegra, en la categoría de Pareja en Diario Femenino.