Frases románticas de películas: un te quiero de cine

El cine tiene mucha culpa de que muchos sean tan románticos, pero es que se ven historias tan bonitas y difíciles de olvidar… Películas antiguas cuyas historias de amor han llegado a nuestros días a través de generaciones: Casablanca, Lo que el viento se llevó… Son todas ellas las historias de amor verdaderas que todos querríamos vivir, y oír de boca de nuestra pareja frases de amor tan profundas que, como ya han hecho las películas, dejen una huella de nuestro amor en la historia que dure para toda la eternidad.

Frases románticas de películas: un te quiero de cine

Una historia trágica historia de amor americana, protagonizada por Montgomery Clift y Elizabeth Taylor en un melodrama de tintes sociales, hace de Un lugar en el sol, de George Stevens, una película inolvidable, donde el "Te quiero. Te quise desde el primer momento que te vi. Te quise incluso antes de verte por primera vez", permanece en la cabeza del espectador 61 años después de su estreno

Nadie podrá olvidar a los mejores actores que América ha dado: Meryl Streep y Clint Eastwood, así como nadie podrá olvidar Los puentes de Madison, dirigida por el propio actor (y director). La declaración de amor más bonita de toda la cinta, sin duda: "Creo que los lugares en que he estado y las fotos que he hecho durante mi vida me han estado conduciendo hacia ti".

Cualquier hijo fruto de los años 70 probablemente tenga marcada una frase en su cabeza, oída en su adolescencia de boca del guapísimo Patrick Swayze: "No dejaré que nadie te arrincone”. Entre esta promesa y el más que famoso baile, toda joven de la época quedaba -y aún hoy queda- enamorada automáticamente.

Tras la época de los bailes de los ochenta, llegó el romanticismo de los 90: "He cruzado océanos de tiempo para encontrarte”, declaraba Gary Oldman, príncipe de las tinieblas, a Winona Ryder en aquel Drácula de Francis Ford Coppola.

Con un punto más español, Coque Malla y Penélope Cruz protagonizaban Todo es mentira. En ella él le confesaba que hasta que la conoció su vida era un error, ¿no es bonito?: “Hace 2 meses no te conocía y por lo tanto podía vivir sin ti. Ahora que te conozco no te puedo dejar marchar. Entonces, me pregunto, ¿llevo 24 años equivocado? Qué horror, nada sirve realmente… Todo es mentira”.

En el año 2000 el guapo Heath Ledger intentaba conquistar a una chica de su instituto. Era por una apuesta, pero al final se enamoraban. Esos sentimientos adolecentes de amor y odio quedaron reflejadas en la que es una de las mejores comedias románticas de la época: 10 razones para odiarte: "Odio cómo me hablas y también tu aspecto, no soporto que lleves mi coche ni que me mires así. Aborrezco esas botas que llevas y que leas mi pensamiento. Me repugna tanto lo que siento que hasta me salen las rimas. Odio que me mientas, y que tengas razón. Odio que alegres mi corazón. Pero aún más que me hagas llorar. Odio no tenerte cerca y que no me hayas llamado. Pero sobre todo odio no poder odiarte, porque no te odio, ni siquiera un poco. Nada en absoluto".

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