Cartas para tus abuelos en el Día de Muertos: textos de amor y homenaje

El Día de Muertos es una celebración mexicana cargada de simbolismo y de significado. Se trata de una fecha idónea para recordar a los que ya no están con nosotros, para conmemorar todo lo que compartimos con ellos en vida, y para preparar su camino a través de altares y flores, de tal manera que nos puedan visitar en un día especial.

Y si de alguien nos acordamos en esta fecha es de nuestros abuelos. Esas personas que tanto nos dejaron y que tanto nos enseñaron y a las que, por supuesto, tanto echamos de menos. Para recordarles y honrarles como se merece, nada mejor que dedicarles unas palabras de afecto. Si no sabes bien cómo empezar, en Diario Femenino te ayudamos con ideas y ejemplos de cartas para tus abuelos en el Día de Muertos, bellos textos de amor y homenaje ideales para tus abuelitos.

Emotiva carta para mi abuelito por el Día de Muertos

Nuestros abuelos, esas personas que siempre han estado ahí y que tanto nos han enseñado con su enorme sabiduría, tienen un lugar preferente en los altares del Día de Muertos. Por tantas y tantas cosas merecen que les escribas un texto cariñoso y de recuerdo. Siempre puedes tomar como inspiración el que te presentamos a continuación y cambiar o añadir cosas que sean más personales.

Querido abuelo,

En una fecha tan importante como hoy, el Día de Muertos, te quiero dedicar unas palabras escritas desde lo más profundo de mi corazón. Tu altar, abuelito, como todos los años, ya está preparado: tu foto en el centro, esas velas que tanto brillan como las estrellas que solías enseñarme en las noches luminosas, tus flores preferidas, tu comida favorita… Espero que, con esto, encuentres el camino para poder visitarnos en este día tan importante para todos.

Me imagino lo que dirías al ver todo esto. Que no es necesario tanto, que con un abrazo basta. Pero para mí, como para el resto de la familia, este altar representa todo lo que eras en vida, todo lo que mereces, y una manera de poder abrazarte aunque ya no estés.

Te extraño mucho, abuelito. Extraño tus historias, esas historias tan lindas con las que aprendí a ser paciente, a encontrar algo maravilloso en lo cotidiano, tal y como tú hacías, y a seguir adelante aunque, a veces, las cosas no sean como esperábamos. A veces, cierro los ojos y puedo recordar todo lo que representabas para mí y todo lo que eras, con ese bastón y con ese sombrero bien puesto, pero, sobre todo, con esa sonrisa en la cara cada vez que te veía.

Me dejaste más que historias, abuelo, me dejaste el valor de la familia, me enseñaste a no rendirme. En mis días más difíciles recuerdo todas tus lecciones, te recuerdo diciéndome que no hay mal que dure cien años, y todas esas palabras de aliento que me dedicabas cuando más lo necesitaba.

En este Día de Muertos, mientras las velas titilan frente a tu foto, siento que la distancia entre nosotros es más corta. Que sigues vivo en mi corazón, que siempre me guías a través de los recuerdos en cada paso que doy. Gracias, abuelo querido, por cada sonrisa, por cada consejo y por haberme enseñado tantas cosas.

Te echo mucho de menos, abuelito.

Un abrazo gigante al cielo,

Tu nieta.

Carta para una abuela fallecida en el Día de Muertos

¡Ay! Qué sería de nosotros sin nuestras preciadas abuelitas, ¿verdad? Desde pequeños aprendemos de ellas con su cariño y con su amor. Por eso, cuando ya no están, dejan una huella imborrable en nuestros corazones. Se merecen que les escribas unas líneas, como estas o de tu propio puño y letra, y las coloques en un lugar de su altar por el Día de Muertos.

Mi muy querida abuelita,

Hoy es el Día de Muertos, y no puedo evitar sentir que estás más cerca que nunca. Me vienen a la mente todos esos recuerdos que compartimos mientras preparábamos este día tan especial. Tu dedicación a la hora de hacer altares para los que no están, tu manera de reunir a la familia en torno a la mesa y preparar esas deliciosas comidas tan únicas, llenando de vida el aire con el aroma de tus guisos, tu forma de alegrar el día y de ver la vida desde un prisma de felicidad…

Mientras preparo tu altar, recuerdo todo lo que fuiste, y lo que eres, para mí. Por eso, he preparado tus flores preferidas, esas que con tanto amor cuidabas en tu bello jardín. También tu taza de café, ese que te gustaba tomar por las tardes mientras compartíamos historias. También está tu foto, rodeada de velas, y todo lo que tanto te gustaba y tanto me gustaba ver que disfrutabas.

Aunque tu partida dejó un vacío enorme, aunque tu ausencia duele mucho, hoy todavía más, tu amor sigue sanando. Recuerdo el calor de tus abrazos, lo reconfortante que eran tus manos acariciando mi cabello cuando te pedía consuelo, la magia de hacerme sentir siempre protegida, tu tenacidad, tu paciencia infinita y cómo siempre encontrabas un bello motivo para sonreír. Tú, con tu risa y tus ojos sabios, sabías hacerme ver que la vida está llena de esperanza.

Quiero que sepas que siempre te llevo conmigo, abuelita, que todas tus enseñanzas las guardo en mi corazón como un tesoro. Que siempre que dudo o tengo momentos difíciles me pregunto qué harías tú, qué me dirías, y eso es muy reconfortante. Sé que en un día como hoy nos dirías que no estuviéramos tristes y que celebrásemos en familia tu legado, tu amor y tu cariño. Y eso es lo que haremos.

Gracias por todo lo que has sido y eres en mi vida. Gracias por tanto y por todo. Hoy te celebramos con mucho amor y mucha gratitud, sabiendo que estés donde estés, nos sigues cuidando como siempre.

Te quiero, abuela.

Tu nieta.

Estas cartas tan bellas para tus abuelitos en el Día de Muertos son una muestra de lo mucho que les echas de menos y lo mucho que les recuerdas. De nuevo, te recordamos que puedes cambiar lo que desees y te animamos a que escribas tus propios textos de amor y de homenaje.

Puedes leer más artículos similares a Cartas para tus abuelos en el Día de Muertos: textos de amor y homenaje, en la categoría de Cartas de amor en Diario Femenino.