Cómo cuidar y reforzar tu relación de pareja

Formas de que tu relación no caiga en la rutina

Laura Sánchez, Filóloga

A veces el amor no es suficiente para mantener una pareja unida y la incompatibilidad de caracteres acaba por romper la relación. Otras veces ocurre que el enamoramiento y la pasión del principio se acaba y la pareja no sabe cómo gestionar el amor que queda.

Son muchos los motivos por los que se llega a la separación en una pareja, y es que no siempre somos conscientes de que para conseguir una pareja estable y duradera tenemos que dedicar mucho esfuerzo a cuidar esa relación. Si crees que has encontrado al hombre ideal, presta atención para conseguir que se quede a tu lado.

La rutina, el principal enemigo de la pareja

Uno de los mayores peligros a los que se enfrenta una pareja es el paso del tiempo. Es difícil no dejarse llevar por lo cotidiano y no caer en una rutina que puede terminar en una separación. Una vez que damos por finalizado el proceso de conquista y creemos tener asegurado el amor, dejamos de cuidar nuestra relación de pareja.

Los problemas del día a día se imponen y ya no nos esforzamos por agradar a nuestra pareja. Las muestras de cariño van desapareciendo, los silencios se hacen más grandes y la distancia entre los dos miembros de la pareja empieza a ser insalvable.

Es el momento de actuar y no permitir que la rutina imponga una barrera entre los dos. Caricias y besos no pueden faltar en el día a día por muy dura que haya sido la jornada en el trabajo. Hay que buscar tiempo para dedicarle a la pareja un momento de atención, que vea que sigues atenta a sus necesidades y que sigue siendo una persona fundamental en vida. Porque hay circunstancias, como por ejemplo la llegada de un bebé, que pueden hacer que tu pareja se sienta desplazada.

Aprender a discutir de una forma sana

Una buena comunicación es la base de una pareja duradera. Es cierto que a veces es complicado, porque hombres y mujeres tienen una forma distinta de entender la relación de pareja y en ocasiones no terminan de entenderse. Lo principal es buscar una vía de comunicación que ambos entiendan para poder resolver todos aquellos problemas de pareja que vayan surgiendo.

Porque las discusiones también son necesarias en una relación sentimental si se hacen de forma sana, sin agresividad, sin chantajes emocionales y sin dañar la autoestima de tu pareja. El objetivo último de una discusión es llegar a un acuerdo frente a los diferentes puntos de vista de la pareja, negociar desde el respeto para que ambas partes salgan beneficiadas.

Discutir no siempre tiene una connotación negativa si sirve para que ninguno de los dos pierda su individualidad dentro la pareja. Al fin y al cabo también nos enamoramos de las diferencias y si aprendemos a respetarlas puede ser uno de los motivos para mantener el amor. En cualquier caso es evidente que no se puede intentar cambiar a un hombre, así que si realmente nos interesa esa relación tendremos que cuidarla para mantener unida la pareja.

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