Cómo romper con tu pareja sin hacerle daño (o el mínimo posible)

Realmente romper una relación no solo le duele a la persona dejada, también le duele a la persona que deja. Es difícil mirar a tu pareja, a la que has querido (o seguramente aún quieras) a los ojos y romper sin pensar en el daño que podemos hacerle. Aunque sea una relación rota, aunque sepamos que es lo mejor, pero aún así cuesta.

Si estás pensando en romper con tu pareja pero tienes claro que no quieres hacerle ningún daño, o el mínimo posible, no te pierdas los consejos que vamos a darte a continuación. Descubrirás todo lo que necesitas saber para llevar a cabo la mejor ruptura posible.

¿Por qué es tan difícil romper con tu pareja?

Si te ha pasado o estás ahora mismo en un momento donde quieres romper tu relación lo más seguro es que tengas sentimientos contradictorios y muchas preguntas como: ¿cómo sé que no me estoy equivocando?, ¿debería intentar arreglarlo más?, ¿me arrepentiré?, ¿hemos pedido ayuda?

Realmente romper con nuestra pareja no es una decisión fácil. Estamos seguras de que lo primero que has hecho es preguntarte si realmente quieres romper y qué razones tienes. Quizás ya llevas un tiempo dándole vueltas o incluso has consultado con algún terapeuta para que te ayude a tomar la mejor decisión. Seguro que te repites una y mil veces que es lo mejor, pero no encuentras las fuerzas.

Puede que llevéis ya un tiempo valorando que la relación anda mal, pidiendo que se produzcan cambios, proponiendo ir a terapia para que otra persona os ayude, pero parece que todo sigue igual. Una y otra vez se repiten las mismas situaciones, estáis desgastados y empezáis a haceros daño. Además, tenéis la sensación de que ya lo habéis intentado todo y que no podéis más. Tal vez sientas que hay intención de estar juntos, pero que solo contamos con la fuerza de voluntad y no está pudiendo arreglar vuestros problemas, así que toca plantearse la ruptura como solución.

Qué debes tener en cuenta a la hora de romper con tu pareja

Realmente no hay una manera adecuada de romper una relación. Pero sí creemos que hay unos mínimos que nos pueden ayudar a llevarlo a cabo de una mejor manera. Hay ciertas cosas que podemos tener en cuenta a la hora de plantearnos una ruptura. Siempre nos puede ayudar pensar como nos gustaría que fuera una ruptura o que no nos gustó de rupturas anteriores.

+ Hazlo en persona si es posible

Intenta que no sea por teléfono o por mensajes. Si no puede ser presencial porque vivís lejos o por cualquier otra razón que os impida quedar en persona, por lo menos intenta que sea una videollamada donde puedas ver la cara y las reacciones de la otra persona. Si decides que sea presencial, dedica un rato a poder hablar.

+ Busca un lugar tranquilo y en el que no os molesten

Puede ser en casa o en la calle, eso no importa si podéis charlar sin sentiros bajo la presión de la gente que os mira en la calle o el camarero que llega si estamos en un restaurante. Si tienes cierto miedo sobre su reacción sobre ti, es decir, que pueda llegar a convertirse en un momento agresivo, no lo dudes entonces, un lugar público será lo mejor. 

+ Piensa bien qué quieres decir y sobre todo escucha a tu pareja

Esto ayudará a que se calme y esté más tranquila y a gusto. Gestiona tus emociones para que puedas transmitir todo lo que quieres decir con calma. Y ayuda si lo ves oportuno a contener a tu pareja según lo necesite o no. Quizás si la reacción es excesiva y dependiendo de la situación podemos parar un poco y continuar un poco más tarde.    

+ Ten claros los motivos y qué quieres hacer

Es muy importante que sepas si de verdad quieres romper. Puede ser útil que puedas escribirlos, y reflexionar sobre cómo pueden sonar tus palabras o cómo le puede sentar a nuestra pareja. No se trata de escribir 10 grandes justificaciones, sino de pararse a pensar los motivos por los que tomamos esta decisión. Es un pequeño tiempo que nos va a ayudar a gestionar el proceso y nuestras emociones pudiendo cuidar también así a nuestra pareja.

+ ¿Es necesario contarle a tu pareja todos los motivos explícitamente?

A veces tenemos que pensar qué tan importante es contar a nuestra pareja todos los motivos por los que queremos esta ruptura y cómo de explícitas tienen que ser esas explicaciones. No se trata de mentir ni de esconder, sino de poner sobre la mesa los aspectos que más nos han llevado a tomar la decisión. 

+ Habla desde el "yo"

Es decir, explica las razones por las que tú sientes que tienes que romper. Esto es muy importante porque en momentos como estos solemos entrar en reproches o en frases del estilo "es que tú" o "ya te he dicho mil veces que…" Este tipo de frases, y más en estos momentos, solo llevan a la otra persona a sentirse aún peor y ponerse a la defensiva.

+ Practicar la empatía con tu pareja

No se trata de pensar que nuestra pareja se va a romper o que debemos tratarle como si fuese un niño. Lo ideal sería intentar entenderla, ver lo que está sintiendo y actuar con el cuidado que crees que se merece. Esta situación no solo deberíamos tenerla en cuenta en una ruptura con nuestra pareja, sino que también podríamos tenerla en cuenta con algún amigo o incluso con nuestros hijos.

+ Acepta que romper a veces también está bien

Es normal que te sientas mal si quieres romper, sobre todo si ves que tu pareja está sufriendo e incluso si aún sientes que quieres a tu pareja. Pero entonces tenemos que tener muy presente que esta decisión que has tomado es una decisión meditada, es lo mejor para vosotros y además eres consciente de que en el fondo os haríais más daño si continuáis juntos.

¿Romper con tu pareja y que no sufra es posible?

Entonces la pregunta del millón es: ¿haciendo todo esto nuestra pareja no va a sufrir? Y la respuesta es: no, nuestra pareja va a sufrir igualmente.

Romper con una persona que queremos, aunque pensemos incluso que es lo mejor, es duro. Tenemos que entender que se nos mueven muchos sentimientos. A veces pensamos que sería mejor no sentirlo, pero ¿no sería algo inhumano?

En terapia siempre preguntamos: ¿qué te parecería si tras vuestra ruptura ninguno de los dos sintiese tristeza o enfado?, ¿qué pensarías? Y la respuesta es la misma, en el fondo sería horrible saber que ninguno de los dos sentimos ni una pizca de tristeza o enfado por la ruptura.

Al final las emociones son algo que aún considerándolas negativas no podemos ni debemos evitarlas. La gestión de emociones consiste en detectarlas, permitirnos sentirlas, elaborarlas y aprender de ellas y gestionarlas para que no se queden enganchadas a nosotros.

Ahora que ya sabes cómo romper con tu pareja sin hacerle daño, no olvides dejarnos un comentario contándonos qué te han parecido nuestros consejos. Y recuerda que puedes compartirlo con aquellas personas que sabes que lo necesitan. 

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