Tras una semana de la muerte de Carlota Cantó Cobo otro accidente consterna a Barcelona
Ya ha pasado una semana desde que aquel conductor ebrio que circulaba en sentido contrario por Cabrera de Mar, Barcelona, acabara con la vida de Carlota a la tierna edad de 18 años, hija de los actores Toni Cantó y Eva Cobo. En el accidente de tráfico también murió su acompañante, Javier Arraut, de 20 años, sobrino de la mujer del candidato a la alcaldía de Barcelona, Xavier Trias.
Y justo cuando ha pasado una semana de este trágico accidente, Barcelona tiene que lamentar otro de características similares. Esta madrugada tres jóvenes de entre 19 y 21 años han fallecido en otro accidente de tráfico que tuvo lugar en el distrito de Sarrià-Sant Gervasi.
En esta semana multitud de homenajes en recuerdo a la joven Carlota, multitud de lágrimas vertidas por esta injusticia. Las lágrimas de su madre, Eva Cobo. Las lágrimas de su padre, Toni Cantó, que a pesar del dolor, se subió a las tablas del Teatro Barakaldo para representar la obra 'Razas', metiéndose en la piel de Jack Lawson, un maquiavélico abogado. Y las lágrimas de todos sus amigos, que a través de la red social Facebook, han demostrado lo mucho que la echan de menos mediante la creación de varios grupos en su honor.
"Mi hija Carlota era una mezcla apasionante de compasión y combatividad. Con ella toqué a menudo el cielo y su recuerdo me permitirá transitar el infierno que ahora vivo?", dijo Cantó en un video con el que quiso dar las gracias por el apoyo recibido.
El lunes, cuando el sol caía, en la más estricta intimidad, enterraban a la joven en el cementerio Parc de Roques Blanques, en el Papiol, Barcelona. Familiares y amigos, descompuestos y rotos por el dolor se acercaban hasta allí para dar el último adiós a Carlota. El jueves por la tarde, en la Iglesia Divina Pastora de La Coruña se celebró un funeral en su memoria.
En este funeral, se dedicaron palabras muy emotivas para la joven, "una chica responsable, madura y sensible", según publica 'La Voz de Galicia'. Y palabras de aliento también para la familia: "Carlota vivió una vida intensa y murió enamorada. Sé que en estos momentos no se entiende nada, pero con el tiempo lo iremos entendiendo". Un funeral al que acudió su madre, pero no su padre, algo que levantó cierta polémica.
Y ahora, después de una semana de lo ocurrido, el conductor kamicaze, Alejandro S.R., de 41 años, se encuentra recuperándose de sus heridas en el hospital, acusado de un delito por homicidio y otro contra la seguridad del tráfico.
Se negó en un primer momento a realizar la prueba de alcoholemia y tuvo que ser un juez quien ordenara que se le practicara un análisis de sangre, cuyo resultado dijo que el conductor quintuplicaba la tasa de alcohol permitida. Toni Cantó también ha tenido palabras para él, deseándole "una pronta recuperación y ánimo y fuerza para soportar la carga que llevará de por vida".
Y justo cuando ha pasado una semana de este trágico accidente, Barcelona tiene que lamentar otro de características similares. Esta madrugada tres jóvenes de entre 19 y 21 años han fallecido en otro accidente de tráfico que tuvo lugar en el distrito de Sarrià-Sant Gervasi.
Semana de homenajes y despedidas para Carlota Cantó Cobo
En esta semana multitud de homenajes en recuerdo a la joven Carlota, multitud de lágrimas vertidas por esta injusticia. Las lágrimas de su madre, Eva Cobo. Las lágrimas de su padre, Toni Cantó, que a pesar del dolor, se subió a las tablas del Teatro Barakaldo para representar la obra 'Razas', metiéndose en la piel de Jack Lawson, un maquiavélico abogado. Y las lágrimas de todos sus amigos, que a través de la red social Facebook, han demostrado lo mucho que la echan de menos mediante la creación de varios grupos en su honor.
"Mi hija Carlota era una mezcla apasionante de compasión y combatividad. Con ella toqué a menudo el cielo y su recuerdo me permitirá transitar el infierno que ahora vivo?", dijo Cantó en un video con el que quiso dar las gracias por el apoyo recibido.
El lunes, cuando el sol caía, en la más estricta intimidad, enterraban a la joven en el cementerio Parc de Roques Blanques, en el Papiol, Barcelona. Familiares y amigos, descompuestos y rotos por el dolor se acercaban hasta allí para dar el último adiós a Carlota. El jueves por la tarde, en la Iglesia Divina Pastora de La Coruña se celebró un funeral en su memoria.
En este funeral, se dedicaron palabras muy emotivas para la joven, "una chica responsable, madura y sensible", según publica 'La Voz de Galicia'. Y palabras de aliento también para la familia: "Carlota vivió una vida intensa y murió enamorada. Sé que en estos momentos no se entiende nada, pero con el tiempo lo iremos entendiendo". Un funeral al que acudió su madre, pero no su padre, algo que levantó cierta polémica.
La vida continúa para el conductor que acabó con la vida de los dos jóvenes
Y ahora, después de una semana de lo ocurrido, el conductor kamicaze, Alejandro S.R., de 41 años, se encuentra recuperándose de sus heridas en el hospital, acusado de un delito por homicidio y otro contra la seguridad del tráfico.
Se negó en un primer momento a realizar la prueba de alcoholemia y tuvo que ser un juez quien ordenara que se le practicara un análisis de sangre, cuyo resultado dijo que el conductor quintuplicaba la tasa de alcohol permitida. Toni Cantó también ha tenido palabras para él, deseándole "una pronta recuperación y ánimo y fuerza para soportar la carga que llevará de por vida".
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