Frases típicas para ser una buena madre

No nos cabe ninguna duda de que el amor más incondicional que existe es el de una madre. Ellas lo dan todo por sus hijas, por darles una buena educación y por su salud, su bienestar y su felicidad son capaces de hacer los más grandes sacrificios. Su instinto de protección surge en el embarazo y no lo dejan atrás nunca, nunca jamás.

Debe ser por eso que les resulta inevitable decirte algunas típicas frases durante toda tu vida, tengas la edad que tengas. Lo peor de todo este asunto, es que estamos tan ligadas a esas frases que se las repetiremos a nuestros hijos sin ningún complejo.

Frases que te convierten en madre

Afrontar la maternidad es complicado. Desde el momento mismo del embarazo empiezan a surgir las dudas de si serás capaz de ser una buena madre, si podrás mantener a tu hijo sano y si sabrás cómo protegerlo en todo momento. No tengas dudas, porque cada madre es la mejor, pero hay un momento clave que te indicará que te has convertido en la madre perfecta y es cuando le digas a tu hijo "bébete el zumo enseguida que se le van las vitaminas".

Atentas madres del mundo, porque los expertos aseguran que un zumo natural puede mantener intactas sus vitaminas hasta 20 minutos. Así que no hay por qué ejercer esa presión ¿quién no se ha estresado cuando ha tenido que atender una llamada justo cuando acababa de hacer el zumo?

Para mayor tranquilidad de madres e hijas también está comprobado que si te tragas un chicle no se pega a las tripas tal y como te amenazaban en la infancia.

Y si de amenazas se trata, tenemos que reconocer que siempre surtió efecto el "no me, no me... que te, que te..." y aún tenemos una punzada de indecisión cuando nos metemos al agua sin haber esperado las dos horas de rigor.

Lo que una buena madre siempre tiene que decir

Da igual si ya hace tiempo que dejaste de jugar a las muñecas, da igual que te hayas recorrido medio mundo y que hayas tenido más parejas que todas tus amigas juntas, para tu madre siempre seguirás siendo una niña a la que hay que proteger. Así que de poco te va a servir enfadarte cuando cada vez que salgas de casa ella te diga "ten cuidado". ¿Cuidado de qué?

Que no te quepa ninguna duda de que para tu madre tu seguridad y tu bienestar es lo más importante. Así que tampoco es necesario que respondas cuando te pregunta "¿vas a salir así?" porque probablemente se trate de una pregunta retórica.

Igual que tampoco tienes que tomarte a mal cuando antes de salir de fiesta tu madre te dice "mira a ver con quién vas" y "no bebas, hija". Dos frases que tu madre suele pronunciar de corrido y que seguramente se trate de coletillas adquiridas a través de la maternidad, pero que no esconden ninguna mala intención.

La verdad es que es mucho lo que le debemos a nuestras madres y no hay modo de agradecer todo el amor recibido y todo lo que nos han enseñado. Son de agradecer también, además de impagables, todos esos consejos de madre, especialmente ese de "abrígate, que vas a coger frío" ya que gracias a él, nunca sales de casa sin tu chaqueta a cuestas.

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