Españoles en Tokyo critican la información publicada sobre Japón y la alerta nuclear
Que el terremoto de 8,9 grados que sacudió Japón el pasado viernes 11 de marzo fue brutal es un hecho, como también lo es el posterior tsunami que arrasó la costa noroeste del país. También es cierto que existe una alarma nuclear por el peligro de fusión que existe en la planta de Fukushima. Sin embargo, no todo lo que se están contando desde la mayor parte de los medios occidentales, y concretamente desde España, es totalmente cierto.
Buena parte de los medios de comunicación de nuestro país han utilizado el sensacionalismo para adornar sus crónicas, mostrando una realidad sesgada que ha servido para engrandecer lo que realmente está ocurriendo. Estamos ante una terrible catástrofe de trágicas consecuencias que todavía hoy, más de una semana después de lo ocurrido, continúa dejando escalofriantes imágenes y ofreciendo titulares de muerte y destrucción, pero lo que no es cierto es que el caos reine en todo el país.
A colación con lo sucedido, un grupo de 24 españoles que viven en Tokyo ha firmado una carta abierta dirigida a los medios españoles en la que se pide que se informe con veracidad y responsabilidad sobre la situación de Japón. En la misiva aseguran también que el Gobierno japonés está informando sobre la situación de la central de Fukushima y que las noticias excesivamente alarmantes están preocupando innecesariamente a sus familiares, que en muchos casos les han pedido o que regresen, o que al menos se alejen lo máximo posible de Fukushima.
Por su parte, el residente en Tokyo Marc Bernabé ha subido un vídeo a Youtube en el que muestra que la vida en la capital de Japón continúa con relativa normalidad. Además, el propio Bernabé junto a Antonio Valverde, Miguel Ángel Ibáñez y José Manuel Segura han colgado otro vídeo en el que cuentan que tanto en Tokyo como en Kyoto, adonde se han trasladado, no está ocurriendo nada grave, si bien es cierto que las prefecturas de Miyagi, Iwate y Fukushima sí que están muy afectadas.
Por todo ello, no es cierto que el caos reine en todo Japón, ni que en Tokyo escasee la comida. El caos rige en las localidades que fueron devastadas, aunque los japoneses están dando un ejemplo de calma y civismo a todo el mundo frente a lo que les ha venido encima. Dentro de esa conciencia ciudadana, los tokyotas no han esperado a que les corten la luz y han sido ellos mismos los que han ahorrado energía en determinados momentos para que no se colapse el sistema.
Una semana después del terremoto y posterior tsunami Japón sigue luchando por ponerse en pie y mientras la situación está volviendo a la normalidad en la mayor parte del país, en Fukushima se sigue trabajando a contrarreloj para minimizar los riesgos nucleares y los escapes radiactivos.
Japón ha elevado el nivel de catástrofe nuclear de 4 -'Accidente con consecuencias de mayor alcance'- a 5 -Accidente con consecuencias de alcance local-. El vertido de agua sobre los reactores han mejorado la situación, sin embargo todavía queda mucho por hacer hasta que el peligro haya pasado por completo.
Según los expertos, la crisis de Fukushima está lejos de convertirse en una hecatombe nuclear como la que tuvo lugar en Chernobyl en 1986, aunque no se puede obviar que el peligro no ha pasado por completo tras este terremoto y posterior tsunami que ha cambiado el eje de la Tierra y que ha resucitado las teorías de un posible fin del mundo en 2012, amparadas por el calendario maya, que realmente no tienen una demostración científica.
Buena parte de los medios de comunicación de nuestro país han utilizado el sensacionalismo para adornar sus crónicas, mostrando una realidad sesgada que ha servido para engrandecer lo que realmente está ocurriendo. Estamos ante una terrible catástrofe de trágicas consecuencias que todavía hoy, más de una semana después de lo ocurrido, continúa dejando escalofriantes imágenes y ofreciendo titulares de muerte y destrucción, pero lo que no es cierto es que el caos reine en todo el país.
Carta a los medios de los españoles residentes en Tokyo
A colación con lo sucedido, un grupo de 24 españoles que viven en Tokyo ha firmado una carta abierta dirigida a los medios españoles en la que se pide que se informe con veracidad y responsabilidad sobre la situación de Japón. En la misiva aseguran también que el Gobierno japonés está informando sobre la situación de la central de Fukushima y que las noticias excesivamente alarmantes están preocupando innecesariamente a sus familiares, que en muchos casos les han pedido o que regresen, o que al menos se alejen lo máximo posible de Fukushima.
Por su parte, el residente en Tokyo Marc Bernabé ha subido un vídeo a Youtube en el que muestra que la vida en la capital de Japón continúa con relativa normalidad. Además, el propio Bernabé junto a Antonio Valverde, Miguel Ángel Ibáñez y José Manuel Segura han colgado otro vídeo en el que cuentan que tanto en Tokyo como en Kyoto, adonde se han trasladado, no está ocurriendo nada grave, si bien es cierto que las prefecturas de Miyagi, Iwate y Fukushima sí que están muy afectadas.
En Tokyo no hay escasez de comida
Por todo ello, no es cierto que el caos reine en todo Japón, ni que en Tokyo escasee la comida. El caos rige en las localidades que fueron devastadas, aunque los japoneses están dando un ejemplo de calma y civismo a todo el mundo frente a lo que les ha venido encima. Dentro de esa conciencia ciudadana, los tokyotas no han esperado a que les corten la luz y han sido ellos mismos los que han ahorrado energía en determinados momentos para que no se colapse el sistema.
Una semana después del terremoto y posterior tsunami Japón sigue luchando por ponerse en pie y mientras la situación está volviendo a la normalidad en la mayor parte del país, en Fukushima se sigue trabajando a contrarreloj para minimizar los riesgos nucleares y los escapes radiactivos.
Japón ha elevado el nivel de catástrofe nuclear de 4 -'Accidente con consecuencias de mayor alcance'- a 5 -Accidente con consecuencias de alcance local-. El vertido de agua sobre los reactores han mejorado la situación, sin embargo todavía queda mucho por hacer hasta que el peligro haya pasado por completo.
Resucitan las teorías sobre el fin del mundo en 2012
Según los expertos, la crisis de Fukushima está lejos de convertirse en una hecatombe nuclear como la que tuvo lugar en Chernobyl en 1986, aunque no se puede obviar que el peligro no ha pasado por completo tras este terremoto y posterior tsunami que ha cambiado el eje de la Tierra y que ha resucitado las teorías de un posible fin del mundo en 2012, amparadas por el calendario maya, que realmente no tienen una demostración científica.
Puedes leer más artículos similares a Españoles en Tokyo critican la información publicada sobre Japón y la alerta nuclear, en la categoría de Sociedad en Diario Femenino.
Publicado:
Actualizado: