El Rey Juan Carlos, destituido de una ONG. Las consecuencias de aquel fatídico viaje
El Rey siempre se acordará de aquel viaje a Botsuana, y no precisamente por lo bien que se lo pudo pasar. Aunque la imagen de la monarquía ya había comenzado a debilitarse por los problemas con la justicia de su yerno Iñaki Urdangarin, el conocimiento de aquella aventura de Don Juan Carlos en un momento no precisamente bueno para el país, ni tampoco para su familia (su nieto, el hijo de la Infanta Elena y Jaime de Marichalar, tuvo un polémico accidente con una escopeta y tuvo que ser ingresado) marcó el punto de inflexión de todo lo que sucedería después.
Corinna zu Sayn-Wittgenstein
Tras investigar que sucedió exactamente en Botsuana, donde el Rey sufrió una rotura de cadera mientras cazaba elefantes, los medios no tardaron en ir soltando detalles que sin duda han dañado la simpática imagen de la que siempre ha presumido Juan Carlos. Algo enfadó al pueblo más aún que la caza de elefantes: su supuesta relación sentimental con Corinna zu Sayn-Wittgenstein, quien le acompañaba en ese viaje.
El supuesto hecho de que el Rey tenga una amante ha hecho que mucha gente le dé la espalda y se ponga de parte de Doña Sofía, quien ha quedado como la víctima de una desgastada relación marcada por la infidelidad del hombre. A partir de ahí, que si viajes privados en compañía de la ex princesa alemana, que si bajas médicas que no cumplió... El Rey ha pedido perdón y sin duda se ha puesto las pilas, pero las consecuencias no han terminado.
El Rey, destituido como presidente honorífico de una ONG
Los socios de WWF, organización dedicada al conservacionismo y la biodiversidad de bosques y ecosistemas acuáticos de la que Don Juan Carlos era presidente honorífico desde su fundación en 1968, le ha cesado con un acuerdo casi unánime: 226 votos a favor contra 13 en contra. Para los miembros de la ONG, quienes se oponen firmemente a la caza, es inadmisible que alguien, por muy Rey que sea y aunque sea dentro de la legalidad, se dedique a cazar elefantes por diversión y ocupe la presidencia de su organización. De ahí que hayan convocado una asamblea extraordinaria para eliminar su cargo.
El Rey ya no tiene el poder que tenía antaño: ahora es reseñable, es criticable e incluso es censurable. ¿Cuál será la próxima acusación popular de la que tenga que defenderse?
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