La princesa Letizia, de sobrio negro en la beatificación del Papa Juan Pablo II

Los príncipes de Asturias no descansan ni un momento. Tan sólo dos días después de viajar a Inglaterra para asistir a la Boda Real entre los nuevos duques de Cambridge, Letizia y Felipe se han trastaladado a Roma para asistir a la beatificación del Papa Juan Pablo II.

Hace unos días la princesa sorprendía con los dos modelos con los que acudió a la Boda Real. Para la cena previa eligió un Felipe Varela en color gris lavanda con palabra de honor, y en la ceremonia lució, del mismo diseñador, un vestido de muselina rosa de terracota con bordados al tono y una pamela del mismo color, muy del estilo Jackie Kennedy.

Pero después de la alegría del fin de semana es momento de ponerse serios. Para la beatificación, según indica la Casa Real, los colores reinantes deben ser oscuros, y de corte sobrio. Así lo ha seguido a rajatabla Letizia Ortiz, con un traje corto de color negro y una mantilla con la que cubría su cabeza.

El príncipe Felipe ha elegido también un estilo dentro de los mandamientos protocolarios para su traje azul marino, con camisa blanca y una corbata azul para compensar los tonos más oscuros. En esta ocasión el protocolo se diferencia de las audiencias con el Papa, cuando el Príncipe debe llevar frac y la Princesa traje largo con mantilla.

Una beatificación multitudinaria

Así han asistido a la ceremonia que proclamaba al Papa Juan Pablo II como beato de la Iglesia Católica, una misa que se ha celebrado en la plaza de San Pedro, en la Ciudad del Vaticano, y ha sido oficiada por el actual Papa, Benedicto XVI.

Al menos 87 delegaciones extranjeras han participadp en la beatificación de Juan Pablo II. Entre ellas, se encuentran representantes de cinco casas reales, 16 jefes de Estado y seis jefes de Gobierno, así como algunas representaciones de la Unión Europea.

Como representantes españoles han acudido el ministro de Presidencia, Ramón Jáuregui, y la nueva embajadora española en la Santa Sede, María Jesús Figa. Además, por parte del PP, ha acudido a Roma María Dolores de Cospedal.

La beatificación se ha producido a las 10:35 de la mañana, con una ceremonia "rápida y sencilla" que "habría gustado" al difunto papa, ha asegurado Benedicto XVI antes miles de personas, que en muchos casos han pasado la noche en la plaza de San Pedro para poder ser testigos directos del acontecimiento.

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