Los detalles más curiosos del compromiso entre Guillermo de Inglaterra y Kate Middleton
Quien aún no se haya enterado del compromiso del Príncipe Guillermo de Inglaterra con su paciente novia de toda la vida Kate Middleton, es que no vive en este mundo. La pareja ya se había comprometido en octubre, durante sus vacaciones en Kenia, pero no querían hacerlo público hasta que su abuela, Isabel II, la Reina de Inglaterra diese su beneplácito. ¡Y vaya que si lo ha hecho! ¡La abuela está encantadísima! No hay más que ver las mejores fotos de Middleton para darse cuenta de los encantos de esta bella mujer.
Pero además del beneplácito de la abuela, hacía falta el del padre de la novia, Michael Middleton, y... obviamente éste no se iba a negar: su niña va a entrar a formar parte de la Familia Real -y con todas las responsabilidades que eso conlleva, claro-.Eso es algo "que intimida", ha afirmado la futura princesa. Aunque después de tantos años de noviazgo, seguro que sabrá comportarse y actuar como es debido. No pierdas detalle de la galería con los mejores momentos de su relación.
Conscientes de que su boda va a ser el mayor evento de la historia reciente de Inglaterra desde 1981, momento en el que se produjo el enlace de Carlos de Inglaterra con Diana de Gales; ayer los dos jóvenes de 28 años se mostraban algo nerviosos ante la prensa, pero como lo hace toda persona de sangre azul -y toda persona que pronto vaya a tenerla como es el caso de Kate-, guardando el tipo.
Pero hubo algo que le quitó protagonismo a la feliz pareja...un anillo hermoso, de zafiro azul -perfectamente a juego con el vestido de la futura mujer del Príncipe-, rodeado todo él de pequeños diamantes, un anillo que parecía gritar: ¡Diana está aquí! Este anillo brillaba con luz propia en la mano de la joven Kate Middleton, el mismo anillo que lució la madre de Guillermo, la Princesa Diana, hace ya casi treinta años cuando anunció su compromiso con el Príncipe Carlos.
El Príncipe Guillermo le regaló el anillo de compromiso de su madre a su prometida precisamente con este fin, el de asegurarse que su madre "no se pierde la noticia del día de hoy y toda la emoción", confesó. Este anillo es sin duda un recuerdo muy especial para el príncipe Guillermo, pero tal y como aseguró ante la prensa "Kate también lo es. Es apropiado que las dos están unidas".
El príncipe tenía claro que quería hacer este regalo a su futura esposa, la mujer con la que esperemos pase toda su vida, pero se trataba de un secreto que nadie debería conocer hasta el momento oportuno. Hasta entonces lo guardó con recelo, y hasta que el anillo no descansó en el dedo de su chica, no estuvo tranquilo. Ante tal detalle, Kate no podía decir que no.
Ambos han conseguido revivir el recuerdo de Diana de Gales, que sin duda estará de nuevo presente en las portadas de los medios, y más aún cuando se celebre la boda, prevista para la primavera de 2011 en Londres.
Esperemos que este amor perdure, y que Kate no se convierta en la nueva Diana de Gales, como han augurado muchos. El enlace de Carlos y Diana terminó en divorcio en el año 1996, y casi un año después la Princesa murió trágicamente en París, en un accidente, cuando era perseguida por un grupo de paparazzis. El Príncipe tenía entonces 15 años.
Kate siente un gran respeto por la madre de su futuro marido, y no desea convertirse en su sustituta, como tanto insiste la prensa sensacionalista británica. Estas comparaciones ya le ha costado a la futura princesa más de un disgusto. Sin ir más lejos, en el año 2007, los abogados de Middleton tuvieron que dar un toque de atención al organismo británico de control de la prensa por este motivo.
Pero no debemos anclarnos en el pasado, debemos mirar hacia el futuro, como hace la pareja, que ha confesado que quiere que la familia crezca, tener hijos pronto. "Ya hemos empezado a pensar en ello" han asegurado. Quizá para el año que viene haya más principitos en la Familia Real Inglesa.
Pero además del beneplácito de la abuela, hacía falta el del padre de la novia, Michael Middleton, y... obviamente éste no se iba a negar: su niña va a entrar a formar parte de la Familia Real -y con todas las responsabilidades que eso conlleva, claro-.Eso es algo "que intimida", ha afirmado la futura princesa. Aunque después de tantos años de noviazgo, seguro que sabrá comportarse y actuar como es debido. No pierdas detalle de la galería con los mejores momentos de su relación.
Conscientes de que su boda va a ser el mayor evento de la historia reciente de Inglaterra desde 1981, momento en el que se produjo el enlace de Carlos de Inglaterra con Diana de Gales; ayer los dos jóvenes de 28 años se mostraban algo nerviosos ante la prensa, pero como lo hace toda persona de sangre azul -y toda persona que pronto vaya a tenerla como es el caso de Kate-, guardando el tipo.
La sombra de Diana de Gales estuvo presente
Pero hubo algo que le quitó protagonismo a la feliz pareja...un anillo hermoso, de zafiro azul -perfectamente a juego con el vestido de la futura mujer del Príncipe-, rodeado todo él de pequeños diamantes, un anillo que parecía gritar: ¡Diana está aquí! Este anillo brillaba con luz propia en la mano de la joven Kate Middleton, el mismo anillo que lució la madre de Guillermo, la Princesa Diana, hace ya casi treinta años cuando anunció su compromiso con el Príncipe Carlos.
El Príncipe Guillermo le regaló el anillo de compromiso de su madre a su prometida precisamente con este fin, el de asegurarse que su madre "no se pierde la noticia del día de hoy y toda la emoción", confesó. Este anillo es sin duda un recuerdo muy especial para el príncipe Guillermo, pero tal y como aseguró ante la prensa "Kate también lo es. Es apropiado que las dos están unidas".
El príncipe tenía claro que quería hacer este regalo a su futura esposa, la mujer con la que esperemos pase toda su vida, pero se trataba de un secreto que nadie debería conocer hasta el momento oportuno. Hasta entonces lo guardó con recelo, y hasta que el anillo no descansó en el dedo de su chica, no estuvo tranquilo. Ante tal detalle, Kate no podía decir que no.
Mirando hacia el futuro
Ambos han conseguido revivir el recuerdo de Diana de Gales, que sin duda estará de nuevo presente en las portadas de los medios, y más aún cuando se celebre la boda, prevista para la primavera de 2011 en Londres.
Esperemos que este amor perdure, y que Kate no se convierta en la nueva Diana de Gales, como han augurado muchos. El enlace de Carlos y Diana terminó en divorcio en el año 1996, y casi un año después la Princesa murió trágicamente en París, en un accidente, cuando era perseguida por un grupo de paparazzis. El Príncipe tenía entonces 15 años.
Kate siente un gran respeto por la madre de su futuro marido, y no desea convertirse en su sustituta, como tanto insiste la prensa sensacionalista británica. Estas comparaciones ya le ha costado a la futura princesa más de un disgusto. Sin ir más lejos, en el año 2007, los abogados de Middleton tuvieron que dar un toque de atención al organismo británico de control de la prensa por este motivo.
Pero no debemos anclarnos en el pasado, debemos mirar hacia el futuro, como hace la pareja, que ha confesado que quiere que la familia crezca, tener hijos pronto. "Ya hemos empezado a pensar en ello" han asegurado. Quizá para el año que viene haya más principitos en la Familia Real Inglesa.
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