Camilla Parker y Letizia Ortiz, lucha de elegancia en la cena de gala del Palacio Real
Los Príncipes de Asturias han ejercido de anfitriones durante la cena de gala celebrada en honor a Carlos de Inglaterra y su esposa Camilla Parker Bowles en el Palacio Real de Madrid.
A la celebración han asistido más de cien invitados, entre los que se encontraban, la Duquesa de Alba, la cantante Estrella Morente, la ministra de Exteriores Trinidad Jiménez, la ministra de Ciencia Cristina Garmendia o la presidente de la Comunidad de Madrid Esperanza Aguirre, que charló animadamente con el Príncipe Carlos.
Antes de todo esto, la visita de Carlos de Inglaterra y su esposa la Duquesa de Cornualles comenzó a mediodía cuando fueron recibidos en el Palacio de El Pardo por los Príncipes. Más tarde se encontraron con Esperanza Aguirre en la Puerta del Sol y luego la pareja británica aprovechó para darse una vuelta por los sitios más turísticos de la capital.
En concreto, la pareja visitó el céntrico mercado de San Miguel. Carlos y Camilla pasearon por los puestos del local e hicieron una parada en una yogutería para probar una de sus especiales.
A última hora de la tarde llegaba el momento de vestir sus mejores galas para acudir a la cena de gala celebrada en su honor en el Palacio Real, un encuentro en el que se han notado alguna diferencias respecto a otras cenas de gala presididas por los Reyes Juan Carlos y Sofía.
En lugar de celebrarse en el Comedor de Gala, la cena ha tenido lugar en el Salón de Columnas. Además la etiqueta también ha variado. Los hombres iban con esmoquin en lugar de frac, y las mujeres sí que han mantenido sus vestidos largos.
Así, con este protocolo, el Príncipe Felipe ha lucido un elegante esmoquin y con la mejor de sus sonrisas ha entrado cogido de la mano de la Princesa Letizia para recibir a Carlos de Inglaterra y Camilla. Por su parte, Letizia Ortiz ha escogido para esta ocasión un elegantísimo vestido rojo de tirante ancho, con cuerpo de guipur y falda de bambula, un color muy socorrido por la Princesa para los grandes acontecimientos.
Poco después llegaban los invitados. Carlos de Inglaterra lucía, al igual que el Príncipe Felipe, un esmoquin con un pañuelo azul que hacía juego con el vestido de Camilla Parker Bowles. La Duquesa de Cornualles ha elegido un diseño azul, de cortes rectos y geométricos, cuello barco, escote cruzado y manga larga, que le sentaba de maravilla.
De esta manera, como ya ha ocurrido durante su recibimiento, Letizia y Camilla han rivalizado en belleza y elegancia. Cada una dentro de su estilo, han vestido sus mejores galas para esta visita en la que ambas se han mostrado muy cómplices. En sus dos encuentros han estado constantemente hablando amigablemente y su complicidad ha sido evidente.
Su siguiente cita es este jueves por la mañana, cuando la Princesa Letizia y Camilla Parker Bowles visitarán juntas, y sin la compañía de sus maridos, la Fundación ONCE del perro guía en Boadilla del Monte.
A la celebración han asistido más de cien invitados, entre los que se encontraban, la Duquesa de Alba, la cantante Estrella Morente, la ministra de Exteriores Trinidad Jiménez, la ministra de Ciencia Cristina Garmendia o la presidente de la Comunidad de Madrid Esperanza Aguirre, que charló animadamente con el Príncipe Carlos.
Carlos y Camilla, tarde de tapas por Madrid
Antes de todo esto, la visita de Carlos de Inglaterra y su esposa la Duquesa de Cornualles comenzó a mediodía cuando fueron recibidos en el Palacio de El Pardo por los Príncipes. Más tarde se encontraron con Esperanza Aguirre en la Puerta del Sol y luego la pareja británica aprovechó para darse una vuelta por los sitios más turísticos de la capital.
En concreto, la pareja visitó el céntrico mercado de San Miguel. Carlos y Camilla pasearon por los puestos del local e hicieron una parada en una yogutería para probar una de sus especiales.
Los Príncipes Felipe y Letizia, anfitriones de la cena de gala
A última hora de la tarde llegaba el momento de vestir sus mejores galas para acudir a la cena de gala celebrada en su honor en el Palacio Real, un encuentro en el que se han notado alguna diferencias respecto a otras cenas de gala presididas por los Reyes Juan Carlos y Sofía.
En lugar de celebrarse en el Comedor de Gala, la cena ha tenido lugar en el Salón de Columnas. Además la etiqueta también ha variado. Los hombres iban con esmoquin en lugar de frac, y las mujeres sí que han mantenido sus vestidos largos.
Así, con este protocolo, el Príncipe Felipe ha lucido un elegante esmoquin y con la mejor de sus sonrisas ha entrado cogido de la mano de la Princesa Letizia para recibir a Carlos de Inglaterra y Camilla. Por su parte, Letizia Ortiz ha escogido para esta ocasión un elegantísimo vestido rojo de tirante ancho, con cuerpo de guipur y falda de bambula, un color muy socorrido por la Princesa para los grandes acontecimientos.
El azul de Camilla rivaliza con el rojo de Letizia
Poco después llegaban los invitados. Carlos de Inglaterra lucía, al igual que el Príncipe Felipe, un esmoquin con un pañuelo azul que hacía juego con el vestido de Camilla Parker Bowles. La Duquesa de Cornualles ha elegido un diseño azul, de cortes rectos y geométricos, cuello barco, escote cruzado y manga larga, que le sentaba de maravilla.
De esta manera, como ya ha ocurrido durante su recibimiento, Letizia y Camilla han rivalizado en belleza y elegancia. Cada una dentro de su estilo, han vestido sus mejores galas para esta visita en la que ambas se han mostrado muy cómplices. En sus dos encuentros han estado constantemente hablando amigablemente y su complicidad ha sido evidente.
Su siguiente cita es este jueves por la mañana, cuando la Princesa Letizia y Camilla Parker Bowles visitarán juntas, y sin la compañía de sus maridos, la Fundación ONCE del perro guía en Boadilla del Monte.
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